29 abr. 2025

Se entrega cómplice de asaltante que murió de un tiro en un minisúper

Atraco.  El autoservice La Rosada, tras el frustrado atraco ocurrido el  martes 25 de setiembre.

Atraco. El autoservice La Rosada, tras el frustrado atraco ocurrido el martes 25 de setiembre.

Uno de los cómplices del ladrón abatido de un tiro dentro del autoservice La Rosada, de Lambaré, que estaba siendo buscado por el frustrado atraco, se entregó ayer en el canal Telefuturo y confesó que ingresó al comercio con un arma de fuego, con intenciones de asaltar el local, pero que no mató a su amigo. En el hecho murió Carlos Iriarte Portillo (20).

“Yo no disparé, mi amigo murió en el transcurso del forcejeo (con el comerciante)”, relató Marco Antonio Sanabria Ortiz (24), en una nota exclusiva con Telefuturo y Noticias Py.

En ese sentido, explicó que el 25 de setiembre ingresó al negocio con un arma automática calibre 22, que tenía una bala, ya que no contaba con el cargador. Una vez dentro, uno de los funcionarios del súper forcejeó con él y en ese momento ya se realizaron 4 disparos en el sitio. “Yo estaba forcejeando con un funcionario, cuando se efectuaron cuatro disparos adentro del lugar. El dueño de la despensa tenía el arma, cuando yo entré se fue corriendo y agarró algo del mostrador y empezó a forcejear con Carlitos”, dijo Sanabria.

Indicó que él y Carlos llegaron hasta el local para asaltar y no cuatro personas como dicen la Policía y los testigos.

Además, afirmó que “el señor (Marcial Morínigo Cardozo, propietario del súper) se quiere tapar nomás, yo tenía un arma con una sola bala y escuché cuatro disparos. Lastimosamente, no tengo cómo comprobar el tema del arma, porque a tres cuadras yo tiré. Yo fui al lugar, sí, quise asaltar, no me salió bien; jamás le disparé a mi amigo”, insistió.

Lamentó la muerte de su amigo y afirmó que fue su idea el asalto. “A mi amigo se le mató, me siento mal porque no le supe cuidar, no pasa un día en que no me culpe, hubiese preferido que me disparen a mí”, se lamentó.

Según Sanabria, el comercio tiene un sistema de circuito cerrado y desea que se muestren las imágenes a las autoridades para que se compruebe que él no disparó en ningún momento.