El Índice de Precios al Consumidor (IPC) coloca así a la variación acumulada de enero a mayo de 2020 en el plano negativo, de -0,4%.
La inflación interanual (variación de precios de mayo de 2020 respecto a mayo de 2019) retrocedió a 0,7%, desde el 2,8% con que había arrancado el presente año. Este indicador se encuentra muy lejos de la meta de 4% que se fija el BCP y del rango de 2% a 6% en que se permite fluctuar a este indicador; además, muestra un inusual comportamiento, pues la ocasión en que se observó un resultado similar fue en mayo de 2013.
Los mencionados resultados de inflación se relacionan principalmente con el abaratamiento del transporte urbano de pasajeros, ajuste que se derivó de la baja de precios de combustibles que se recogió a nivel local desde el desplome de los precios internacionales.
Desde el BCP consideran que esta tendencia permanecerá al menos en las próximas semanas y se suma a la merma del consumo que siguió a la caída de los ingresos de las familias, resultante del freno a la actividad económica aplicado como medida de contención de la expansión del coronavirus en el país.
El economista jefe del BCP, Miguel Mora, explicó que la carne vacuna también se encuentra entre los productos con reducción de precios, debido a la sobreoferta de cortes de consumo masivo en los comercios.
Reconoció que otros países sufren un incremento de precios de alimentos, principalmente de cortes vacunos, debido a la interrupción del suministro y al ser importadores de estos productos.
La Cifra
2,5
por ciento es la proyección de inflación para el cierre de 2020, según el BCP; cifra corregida del 3,9% anterior.
