“Kamil Stanek se presentó por su propia voluntad en la comisaría de Zawiercie”, en el sur del país, y su puma fue entregado al zoo, anunció la policía en Facebook.
En Polonia está prohibido tener animales peligrosos. Por eso la justicia ordenó al exsoldado entregar el animal al zoo, pero éste se negó y escapó.
“No es un juguete. Es un animal considerado como uno de los más peligrosos del mundo, que puede representar una amenaza real para la salud y la vida de la gente”, advirtió la directora del zoo de Poznan (oeste), Ewa Zgrabczynska.
El viernes, representantes del zoo lo localizaron, pero el ex militar los amenazó con un cuchillo y huyó hacia un bosque con el animal atado a una correa, según medios locales.
De acuerdo al diario Gazeta Wyborcza, el veterano de Afganistán había comprado el animal hace seis años en la vecina República Checa y lo había criado en casa.