Dentro de ese contexto, mencionó que está elaborando un proyecto que apunta a la derogación de la ley que crea la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
Otro colegas, como Eduardo Petta y Desirée Masi, consideran que este punto es atribución del presidente de la República, Horacio Cartes.
Amarilla fue enfático al señalar que los agentes de la Senad solo sirven para “hacer show hollywoodense”.
Esto con respecto a una dudosa intervención en Nueva Italia que terminó con la muerte de una niña.
“Este trágico acontecimiento desnuda el fracaso del Gobierno en materia de seguridad”, sostuvo el senador.
Alegó que había síntomas de descomposición, que se vienen arrastrando desde meses atrás, y que al final surgen eventos, como el de Pedro Juan Caballero “y se corona con el lamentable episodio de la intervención de la Senad”.
“A partir de esa situación, la autoridad del presidente (Cartes) está en entredicho, está en duda su capacidad de gestionar los temas más sensibles, en el que una de las piedras angulares es la seguridad”, manifestó.
Consideró incomprensible que sigan en sus puestos el ministro del Interior, Francisco De Vargas, y el comandante de la Policía, Críspulo Sotelo.
Dijo que el presidente se va encapsulando y evidencia el divorcio con la gente por su incapacidad de construir puentes de diálogo.
A modo de anécdota, mencionó que hace un poco más de un año le remitió una carta al mandatario, y que este se la devolvió, lo cual considera como una intolerancia.
Por su parte, el titular del Congreso, Mario Abdo Benítez, anunció que intentó comunicarse con Luis Rojas, quien ayer renunció a la Senad, y con el ministro del Interior y el comandante para conocer sus versiones.