“El número de RSPA es lo que la gente tiene que buscar en un envase. El número significa que el producto está registrado ante la autoridad sanitaria, en este caso que es el INAN”, explicó la licenciada Elsi Ovelar, directora del INAN.
El RSPA –añadió– se encuentra en el etiquetado del envase, en la parte posterior. En la información debe mencionar el RE, el RSPA con el número correspondiente. Además de las indicaciones de preparación o consumo del producto, junto con datos del lote y vencimiento.
Entre otros datos debe especificar también la habilitación de Senacsa, la dirección, localidad de la empresa e incluso un número de contacto. Estos datos son obligatorios en el etiquetado. (Ver infografía).
El RSPA es como la cédula del producto, dice quién es el elaborador y el establecimiento. En caso de ser importador, debe contar con RE que garantiza si la empresa cuenta o no con las condiciones para traer productos al país, por ejemplo, en el caso de congelados, que cuente con las condiciones para mantener ese alimento, señaló.
“Si yo importo productos congelados, tengo que tener los elementos necesarios para mantener congelados los alimentos. Se otorga el registro de establecimiento y luego se registran los productos alimenticios. Ese es el paso”.
El etiquetado de los alimentos –señaló la titular del INAN– tiene que estar en el idioma del país. “En nuestro caso tiene que estar en español. En el caso de que el envase tenga otro idioma, toda esa información obligatoria tiene que estar en un sticker grande, donde uno pueda leer cuál es la naturaleza de ese producto, cuáles son los componentes que tiene, si tiene alérgenos, si es libre de gluten o no, cuál es el contenido neto, la vida útil, el modo de conservación”.
Ante la oferta de productos alimenticios en puestos callejeros, –cuyo control está bajo la responsabilidad de las municipalidades–, la directora del INAN recomendó solo comprar productos de locales establecidos y en reglas para mayor garantía de salud.
“Lo que solemos decir también es que el consumidor tiene que ser delicado y tiene que ser exigente”. Aconsejó adquirir productos alimenticios de los locales que tengan una infraestructura limpia y ordenada.