La manifestación por momento se desarrolla en medio de un ambiente tenso y caldeado, atendiendo que a ratos se producen roces con los camioneros que presionan para poder ingresar en la sede de la ANNP. La medida de bloqueo de los trabajadores provoca una larga fila de camiones de cargas extendiéndose por varios kilómetros por una de las principales avenidas de la capital departamental.
Así como hicieron los trabajadores de Ciudad del Este, los encarnacenos ahora ya no pretenden solo kits de víveres para levantar la medida, sino que exigen la reapertura del puente internacional San Roque González de Santa Cruz y en caso de que no se logre avanzar con la apertura, exigen el apoyo de G. 500.000 y una bolsa de víveres para cada uno de manera mensual, hasta tanto se vuelva a abrir el cruce fronterizo con Argentina.