Ahora se menciona que el ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez, quien también es consejero de la entidad, se reunirá con su par de Brasil, Alexandre Silveira, el ministro de Minas y Energía del gigante sudamericano, buscando una salida al reconocido impasse. Sin embargo, no existe fecha definida para este encuentro.
Paraguay sigue pretendiendo aumentar la tarifa, que en el 2023 fue de USD 16,71 kW/mes, mientras que Brasil insiste en reducir la cifra, e incluso habría rechazado una propuesta paraguaya de USD 19,66 kW/mes.
El canciller había estimado “que es posible alcanzar una propuesta técnica de tarifas para esa ocasión”, en alusión a esta semana, pero tal pronóstico no aconteció. “Respecto de la tarifa, lo que puedo compartir con ustedes es que tenemos sobre la mesa cuatro números, los números no se los voy a dar porque son parte de la negociación. Dos números que administra Brasil, y dos números que tenemos nosotros dentro de esa negociación”, contó entonces.
Por su parte, Javier Giménez había revelado que se buscaba llegar a USD 22,23 kW/mes para generar USD 1.000 millones de recursos adicionales para Paraguay.
A su vez, el presidente de la República, Santiago Peña, admitió que están buscando un acuerdo con Brasil y que “ojalá salga un punto intermedio”, guarismo que se desconoce. “Estamos en este impasse, en el que ellos (Brasil) nos han pedido que mantengamos la misma tarifa del año pasado, y nosotros creemos que hay un espacio para volver a una tarifa que ya teníamos en el pasado. Ojalá salga un punto intermedio, puede ser un poco más alta, un poco más baja”, había declarado el mandatario.
Negativo. Por otro lado, expertos habían augurado en la semana un pronóstico negativo sobre la tarifa de Itaipú. Así, el ingeniero Pedro Ferreira, ex presidente de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), estimó que se aprobará una tarifa intermedia, la que menos conviene al Paraguay. También vaticinó que el Gobierno no incluirá los gastos sociales dentro del Presupuesto General de la Nación (PGN), “para que no puedan ser controlables”.
“Y estimo que van a intentar (…) que se acuerde un convenio operativo que le permita a la ANDE comprar o recomprar de la empresa brasileña cuando contrató en algún horario por debajo de sus necesidades, que es lo que se conoce como Acuerdo Operativo”, opinó Ferreira.
En el mismo sentido, la ingeniera Mercedes Canese, ex viceministra de Minas y Energía, señaló que el panorama es “desolador”, con Paraguay en una “actitud mendicante, de plantear una cuestión ilegal” al buscar subir la tarifa, dejando de lado la reducción que establece el Anexo C.
“(La posición del Gobierno) más bien nos perjudica, le pone también presión al Brasil para no ceder, porque Lula no se va a arriesgar a hacer algo ilegal que pueda ser causal de un juicio político, teniendo minoría en el Congreso”, reflexionó la profesional.