La primera reunión se realizó en la ciudad de Nueva Esperanza, Departamento de Canindeyú, donde los miembros de la Asociación de Productores de Soja y Oleaginosas (APS) de la zona reafirmaron su posición respecto a los nuevos eventos biotecnológicos que lleguen al país.
Primeramente, sostienen que el pago de canon no se puede calcular teniendo como base una presunta cosecha como se realiza actualmente. Y en segundo lugar, los productores quieren participar de la definición de los precios de las regalías. “No estamos en contra del pago por la biotecnología, pero queremos el precio justo”, dijo al respecto el presidente de la APS, Eno Michels.
De momento la multinacional Bayer es la que ingresó al mercado una nueva propuesta, la Intacta 2 Xtend. El sector busca llegar a un acuerdo entre partes privadas, aunque hasta el momento no lograron ser escuchados por los proveedores de paquetes tecnológicos. La idea es llevar este debate a más zonas productivas del país, a fin de llegar a un consenso nacional con los agricultores.
De la audiencia pública de ayer participó el diputado Colym Soroka, quien presentó dos proyectos de leyes que fueron rechazados por todos los gremios productivos, aunque despertó la discusión sobre regalías.
