Natalia Insfrán
En el año 1932 había iniciado el conflicto bélico entre dos países vecinos, Bolivia y Paraguay, el cual arrebató la vida de 30.000 paraguayos y 50.000 bolivianos, siendo uno de los mayores enfrentamientos del siglo XX dentro de Latinoamérica.
“La Guerra del Chaco inició con el ataque de un avión boliviano al fortín Carlos Antonio López, situado en la laguna Pitiantuta. Paraguay reaccionó un mes después y fue entonces cuando la guerra fue un hecho. Posteriormente, los bolivianos, en represalia, tomaron más fortines paraguayos. Luego, Paraguay recupera Boquerón y a partir de ahí la contienda se volvió general en todo el Chaco”, relató el historiador Fabián Chamorro.
El experto sostuvo que se movilizaron unos 150.000 paraguayos y murieron en batalla unos 30.000, en tanto se movilizaron 150.000 bolivianos y perdieron la vida en la guerra 50.000 hombres.
El año pasado gran parte de los pocos leones guaraníes que quedaban de aquella contienda perecieron y fueron despedidos con honores en el Memorial Defensores del Chaco, que se encuentra asentado en el Cuartel de la Victoria.
Hoy restan solo ocho excombatientes en distintos rincones del país, según los registros del Ministerio de Hacienda, a mayo de este año.
Prosiguiendo con el relato histórico, Chamorro contó que el 16 de julio de 1932 una columna paraguaya recuperó el Fortín Carlos A. López sin encontrar resistencia. Esta acción fue considerada como un causus belli y transcurridas 72 horas del suceso, el presidente Daniel Salamanca salió al balcón del Palacio Quemado de La Paz, exhortando a las masas a alzarse en armas contra Paraguay.
“La Guerra del Chaco duró exactamente tres años porque los bolivianos tomaron el fortín un 14 de junio del año 1932 en Pitiantuta y la guerra culmina el 12 de junio de 1935”, indicó Chamorro.
Algunas de las batallas más importantes de este conflicto bélico fueron Boquerón, Nanawa, Campo Jordán, Campo Aceval y Alihuatá, Campo Vía, Fortín Saavedra y Fortín Muñoz, entre otras.
El historiador agregó que jóvenes de 17 años lucharon en esta contienda, incluso, se tienen archivos de menores de 15 años que participaron en la guerra.
“El primer regimiento de jóvenes paraguayos fue a partir de 17 años, pero yo encontré registros de chicos de 15 a 16 años que también fueron a la guerra, pero no se sabe con exactitud si combatieron o no, porque también podrían haber cumplido servicios adicionales como camilleros o de mensajeros de correspondencia, pero sí se hallaron varias fichas”, sostuvo.
La comunidad internacional convocó a la Comisión de Neutrales compuesta por varias naciones de la región, entre estas Argentina, Chile y Brasil, las cuales consiguieron una tregua de veinte días que fue ratificada por Bolivia y Paraguay desde 19 de diciembre de 1933 hasta el 6 de enero de 1934. A comienzos de enero de 1934, el ejército paraguayo reanudó su avance en el Chaco Boreal y conquistó el Fortín Platanillo, el Fortín Loa, el Esteros y el Jayucubás.
guerra innecesaria. Chamorro explicó que Paraguay como Bolivia estaban en periodos inestables tanto políticos, como económicos.
“Fue una guerra totalmente innecesaria y no se pudo evitar por la inestabilidad de nuestros países porque tanto Paraguay como Bolivia pasaron por periodos muy inestables políticamente. Cuando Paraguay empezó a negociar el Chaco hasta la guerra, pasaron por golpes de Estado, revoluciones, cuartelazos, entonces, era imposible que se realicen negociaciones con un gobierno estable como para llegar a un acuerdo definitivo”, afirmó.
La Paz del Chaco llegó cuando Paraguay había agotado sus fuerzas no solamente humanas, sino logísticas y económicas, porque el país estaba en quiebra y ya el Ejército estaba replegando. El Tratado de Paz se realizó tres años después, en julio de 1938, cuando se llegó a un acuerdo en la delimitación del Chaco y a partir de ese momento ya no hubo otras diferencias con el país vecino
“Bolivia también estaba pasando muy mal porque esta fue una guerra que fue desgastando cada vez más su país, inclusive, pasaron por un golpe de estado que echó a su presidente y se venían tiempos muy complicados para los dos países si continuaba la guerra”.