Buena, bonita y barata. La vacuna rusa Sputnik V reúne todo lo que exige la regla de la triple B.
Y en esta carrera que se desató por desarrollar una inmunización contra el Covid-19, la Sputnik está corriendo con bastantes ventajas (ver infografía); frente a la de Pfizer, Moderna, CoronaVax y AstraZeneca, que gestiona a la par el Gobierno. En la órbita también está la de Johnson & Johnson –que es de una sola dosis–, pero que no sería aprobada antes de marzo.
El Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF) publicó ayer que el Ministerio de Salud de Paraguay autorizó el uso de emergencia de la vacuna rusa.
Lo que esta entidad hizo fue, quizá, adelantarse un poco a lo que se negocia bajo estricta confidencialidad, luego de que el Gobierno paraguayo diera luz verde a la ley que permite traer vacunas, por fuera del mecanismo Covax y aceptando los requerimientos impuestos por las multinacionales.
ASEQUIBLE
Sobre la base de que desde la cartera sanitaria se pretende adquirir un primer lote de 100.000 dosis, esta carga no superaría los USD 1 millón porque el costo de cada inyectable es de USD 10, según confirmó a ÚH, Arseniy Palagin, secretario de prensa de la RDIF. Consultado el portavoz ruso acerca de si es posible saber cuánto es el pedido que hizo Paraguay, contestó: “Todavía no, estén atentos”. Refirió que en breve se tendrá alguna novedad que “se anunciará por separado” para el país.
Estos dichos dejan señales de esperanza, en virtud de que todos –tanto propios como extraños– están pendientes de la inmunización contra el coronavirus.
Y es que las negociaciones con los fabricantes se manejan entre bambalinas y bajo siete llaves.
Al parecer, al fondo soberano ruso se le chispoteó anunciar que el Paraguay autorizó el uso de la Sputnik V y dejó entrever lo que se avecina, pero que aún no se oficializa por aspectos contractuales.
“El anuncio de esta mañana (por ayer) del Fondo Soberano Ruso, con relación a la aprobación bajo régimen de emergencia, de la vacuna Sputnik V, es un reconocimiento importante de las gestiones que está haciendo Paraguay, con el fin de ofrecer a la población una vacuna efectiva y fiable”, difundió la página del Ministerio de Salud Pública (MSP) en Twitter.
Esa publicación se hizo acompañada de una imagen donde las banderas de Paraguay y Rusia se confunden flameantes.
“Si bien los acuerdos de confidencialidad no permiten entrar en detalles, esta noticia es, sin duda, una muestra del avance de las negociaciones, las cuales esperamos tengan un desenlace altamente positivo en el corto plazo”, continuó el hilo del posteo ministerial en dicha red social.
A su vez, la oficina de prensa del MSP aclaró que la autorización para uso de emergencia alcanza a todas las vacunas en desarrollo, no solo a la rusa. “Las negociaciones están en diferentes estados y llegado el momento, el propio ministro dará el informe sobre resultados de los acuerdos que puedan concretarse”, indicaron.
Se aproxima una “semana decisiva”
El Ministro de Salud, Julio Mazzoleni, afirmó ayer que la semana entrante será decisiva respecto a la adquisición de las vacunas contra el Covid-19.
“Todavía estamos circunscriptos a acuerdos de confidencialidad y, además, por una cuestión de prudencia hasta que no estén firmados los contratos, preferimos no dar a conocer esto. Lo que sí, les puedo decir, es que estamos dentro de la meta que nos hemos propuesto en lograr las vacunas dentro del primer trimestre y estamos muy cerca de eso. Y creemos que, incluso, podrían darse novedades tan pronto como la semana que viene en cuanto a las decisiones”, dijo.
Mazzoleni puso énfasis en aclarar que la resolución ministerial N°746/2020, que autoriza el uso de emergencia de vacunas contra el nuevo coronavirus, alcanza a todas que tengan el respaldo “de un organismo regulatorio de países de alta vigilancia o de referencia regional”. En este caso, la vacuna rusa cumple con lo requerido para ser aplicado en Paraguay, a instancias de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) que autorizó al Ministerio de Salud de Argentina el uso de emergencia de la Sputnik V.