Monges es agente del Departamento de Control de Automotores de la Policía Nacional con base en Hernandarias. El 24 de abril pasado recibió el pedido de apoyo de sus camaradas de Ciudad del Este por el asalto que se estaba perpetrando a la empresa Prosegur.
En su intento por enfrentar a los delincuentes fue gravemente herido con arma de fuego en la zona del abdomen, lo que le produjo lesiones intestinales. “Fue un momento de impotencia, porque nos vimos sobrepasados por esa gente”, recordó en comunicación con Radio Monumental.
Desde entonces permaneció internado en la Fundación Tesãi en el Este del país, donde fue sometido a tres cirugías. “Estuve a punto de perder la vida”, indicó.
Al cumplirse un mes del suceso, el suboficial ya cumple el reposo médico correspondiente en su vivienda, en compañía de su familia, en la ciudad de Asunción. Está casado y tiene una hija.
Antes de reinsertarse a su lugar de trabajo debe enfrentar otra operación.
Del asalto tipo comando participaron alrededor de 60 personas, supuestamente miembros del Primer Comando Capital (PCC). Prácticamente tomaron la ciudad, haciendo barricadas con vehículos incendiados para impedir el paso de policías, y esparcieron clavos miguelitos para evitar ser perseguidos.
Durante el atraco mataron al suboficial Sabino Benítez, en tanto que para llegar al botín dinamitaron el edificio. Los delincuentes lograron escapar con USD 12 millones vía fluvial, por Hernandarias. Unas 12 horas después se enfrentaron a la Policía Federal de Brasil en la zona de Itaipulandia, donde comenzó la serie de detenciones.