Este multimillonario ex banquero de 42 años, nieto de inmigrantes indios, llega al poder en un momento complicado. Enfrenta una crisis económica y social agravada por los planes ultraliberales de Truss en tiempos de alta inflación, la fractura del Partido Conservador que no deja de profundizarse desde el Brexit y la necesidad de convencer de su legitimidad como jefe de gobierno.
Truss cometió “algunos errores”, reconoció en su primer discurso, frente a la puerta del número 10 de Downing Street. “He sido elegido como líder de mi partido y su primer ministro en parte para solucionarlos y ese trabajo comienza inmediatamente”, aseguró.
Prometió devolver “la estabilidad y la confianza económicas”, pero advirtió que para ello “habrá que tomar decisiones difíciles”, haciendo temer inminentes recortes presupuestarios y subidas de impuestos.
Su llegada al poder pareció tranquilizar a unos mercados convulsos desde hace semanas: la libra se disparó un 1,9% frente al dólar.
Sunak fue elegido nuevo líder del gobernante Partido Conservador el lunes.. Un día después, el rey Carlos III le invitó a formar un ejecutivo. Se convierte así en el primer jefe de gobierno británico surgido de una minoría étnica y el más joven en más de 200 años. AFP