El discurso frecuente del titular del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), Ramón Jiménez Gaona, es que el superviaducto, inaugurado recientemente entre las avenidas Aviadores del Chaco y Madame Lynch, se adjudicó por G. 124.210 millones a la empresa española Corsán Corvian (del grupo Isolux Corsán) y que no registró ningún incremento respecto al costo inicial.
Sin embargo, según una resolución que firmó el propio ministro el 17 de octubre del año pasado, a la que accedió ÚH, reveló que el proyecto registró un encarecimiento de G. 3.133 millones “como consecuencia de las modificaciones introducidas en la planilla de cantidades”, según reza en el documento firmado por el titular del MOPC (ver facsímil).
“El llamado superviaducto es una obra emblemática que tuvo un costo inicial estimado de US$ 23,7 millones al cambio actual (G. 135.000 millones) y se construyó por USD 21,8 millones (G. 124.210 millones). La adjudicación representa un 9% menos que el precio estimado”, expresó Jiménez Gaona la semana pasada en conferencia de prensa, versión que repitió durante toda la semana a diferentes medios.
“No tuvo sobrecosto y se terminó en plazo. Es más, las modificaciones realizadas al diseño antes de su construcción demandaron mayor costo que fue imputado a las ganancias de la empresa”, alegó el secretario de Estado, criticando a la prensa por no resaltar que el proyecto “no ha registrado un encarecimiento”.
Ayer durante todo el día intentamos tener la versión del MOPC sobre el tema, pero no respondieron las llamadas. En horas de la tarde, el ingeniero René Peralbo, jefe del Departamento de Ejecución de la cartera, respondió un mensaje que le remitimos y alegó: “No conozco ninguna resolución de encarecimiento. Se adjudicó por USD 23 millones y se ejecutó por esa suma”.
Le insistimos que contábamos con la resolución en cuestión e incluso le mandamos una copia del mismo, a lo que contestó: “Para pagar expropiaciones es el convenio. Porque la expropiación es un ítem de planilla. La expropiación prevista en la planilla es de G. 12.000 millones”.
Lo concreto es que en la resolución 1.794 que firmó Jiménez Gaona se puede ver que el encarecimiento representó casi el 3% del monto total del contrato. Es decir, que el costo final del paso a desnivel será de G. 127.343 millones, respecto a los 124.210 millones que costaba desde un comienzo. En el documento incluso se otorgó una prórroga del plazo de ejecución de 92 días, con lo cual se fijó la fecha de culminación para el 15 de marzo pasado.
SUPUESTOS SOBORNOS. Una investigación de la policía judicial española reveló el supuesto pago de coimas en el contrato para la construcción del superviaducto, que se descubrió gracias a un seguimiento a las cuentas del político español Jordi Pujol Ferrusola, a quién se lo vincula en un caso de “corrupción internacional”. La pesquisa involucró a Paraguay, específicamente en el contrato del superviaducto. El contacto de Pujol en Paraguay era el empresario Ernesto Dos Santos, conocido del ministro Jiménez Gaona.