El Consejo de Administración de Itaipú, integrado por miembros de Paraguay y Brasil, debe decidir en setiembre próximo el presupuesto de la entidad correspondiente al 2022, además de evaluar y expedirse sobre el futuro precio de la tarifa de la energía eléctrica, la cual bajaría en un 25%, según vaticinó Fabián Cáceres, asesor de la gerencia técnica de la ANDE, a una radio capitalina.
El precio de la tarifa de energía eléctrica bajaría entre 25% y 28% en 2022, año en el que habría una importante reducción de la deuda de Itaipú como parte de la amortización de ese componente clave que es parte de la estructura del costo unitario del servicio de electricidad (CUSE), según indicó Cáceres.
El profesional detalló que el componente principal de la estructura del CUSE de Itaipú es la carga financiera en un 62%, además de la existencia de otros componentes como capital, royalties, resarcimiento, gasto y saldo de la cuenta de explotación, lo cual se suma todo en el año y se divide por toda la energía que pueda producir la central y de allí sale un costo determinado.
El asesor indicó que actualmente la deuda orilla los USD 2.062 millones y eso en 2022 bajará a USD 1.445 millones, que implica una reducción del 30%. Adelantó que en setiembre se decidirá en Itaipú cuál será la tarifa para el 2022 y puntualizó que ese cálculo se basa en la misma fórmula hecha durante años, por lo que habrá una reducción en la tarifa cercana de entre 25% y 28%.
“En el 2023 la deuda bajará a USD 254 millones y prácticamente desaparece, y allí la tarifa tendrá una reducción muy importante”, manifestó Cáceres a la 970 AM.
TEMOR. La preocupación existente, según el experto de la ANDE, radica en que la disminución del costo de la tarifa de la energía eléctrica permita una disponibilidad de mayores ingresos sobre algunos elementos, incluidos en el Anexo C, motivo que dificultará que la tarifa baje abruptamente, se negocie, y luego vuelva a subir, ya que en la práctica eso no podría funcionar.
“Lo ideal es que baje la tarifa, pero no tanto, mientras esto se negocie. Ojalá lleguemos a un acuerdo antes del 2023, pese a que el canciller (Euclides Acevedo) dijo que las negociaciones del Anexo C quedarían en manos del próximo gobierno. Para mí es una decisión muy peligrosa y lamentable, porque si la tarifa llega a bajar totalmente, Brasil será el beneficiado, el cual tiene dos objetivos principales, como disponer de la energía que Paraguay no usa al mejor precio y bajar la tarifa de Itaipú. Así, lograrán lo que pretenden”, adujo Cáceres.