La ley establece que el MEMH será el organismo encargado de elaborar, proponer y ejecutar las políticas de Estado y disposiciones del Poder Ejecutivo referentes a la prospección, exploración, transformación, transporte, distribución, almacenamiento, comercialización, exportación e importación y uso de recursos naturales.
El ministerio dispondrá del 5% de los ingresos por cesión de energía a Brasil y Argentina establecida en los Tratados de Itaipú y Yacyretá. Además, recibirá el 5% de los beneficios netos por la exportación de energía eléctrica que efectúe la ANDE o cualquier otra entidad al exterior, según liquidación remitida al Ministerio de Hacienda en forma mensual.
Asimismo, la nueva secretaría de Estado dispondrá del 100% de los cánones vigentes en los permisos y contratos de prospección, exploración y explotación de recursos minerales, canteras e hidrocarburos y el 50% de las regalías de los contratos vigentes.
COMITÉ ESPECIAL. La ley contempla la creación del Comité Energético Nacional, el cual se constituye en el órgano consultivo del ministerio con participación multisectorial público-privada, que deberá acompañar, controlar y observar el comportamiento de los planes establecidos en la política energética.
La legislación faculta al nuevo MEMH a seleccionar a los profesionales y técnicos de probado nivel que prestan servicio en las instituciones que forman parte del sector energético para que pasen a colaborar y desempeñar funciones y servicios en la nueva entidad pública.
El ingeniero Ramón Montanía, ex consejero paraguayo de la EBY, señaló que el sector energético es el pilar para el desarrollo del Paraguay y por ende la creación del Ministerio de Energía es esencial para lograr el crecimiento deseado.
Este ente debe elaborar la política energética e impulsar su ejecución, apuntando principalmente a la utilización masiva de la abundante energía eléctrica que dispone Paraguay. Este ministerio debe encargarse de las negociaciones en Itaipú y Yacyretá, añadió.
Aseguró que el MEMH no representará más gastos para el Estado, porque la infraestructura y los funcionarios técnicos del VMME pasarán a formar parte de él.