(EFE)
La revisión interna de la NSA está enfoncándose en la posibilidad de que Snowden, extécnico subcontratado de la agencia, pudiera haber accedido a información sobre espionaje internacional que perjudique a esas operaciones en el futuro porque desvelen las vulnerabilidades de países como China.
Los funcionarios estadounidenses consultados por el diario temen que nuevas revelaciones muestren detalles sobre métodos de espionaje electrónico internacional que permitan a países extranjeros solucionar las vulnerabilidades que ahora tienen.
Según uno de los funcionarios consultados, Snowden pudo tener acceso a cientos de miles de páginas de información de las redes internas de la NSA, aunque otra de las fuentes considera que debido a lo revelado hasta ahora no parece que el joven tenga a su disposición datos de inteligencia de mayor valor.
“Ha conseguido mucho, pero ni siquiera está cerca de lo más grande”, indicó la fuente.
El periodista del diario británico The Guardian, Glenn Greenwall, con el que Snowden contactó para iniciar las filtraciones, ha advertido de que, si al informante le sucede algo, se publicará toda la información a la que tuvo acceso.
Hasta el momento, Snowden ha revelado detalles de un programa que recolecta a diario millones de registros de llamadas telefónicas en EE.UU. y de otro que podría acceder a los servidores de las mayores empresas estadounidenses de internet para espiar comunicaciones.
Además, ha denunciado las técnicas de espionaje a socios de la Unión Europea o países Latinoamericanos, los cuales han pedido explicaciones a Washington por las intromisiones.
Pese a que no se han revelado grandes detalles sobre cómo se ejecuta el espionaje a China y funcionarios del gobierno chino, las filtraciones de Snowden ya han tenido repercusión en las relaciones bilaterales de Estados Unidos y China.
Esta semana, en plenas conversaciones del diálogo estratégico entre China y EE.UU. en Washington, los papeles de Snowden han rebajados el impacto de las quejas de la Casa Blanca sobre el ciberespionaje que realiza supuestamente Pekín sobre objetivos estadounidenses.
Según el Post, el gobierno estadounidense está muy molesto por los contratiempos diplomáticos que están provocando las filtraciones de Snowden.