El Ministerio de Justicia informó que Miguel Ángel Insfrán, alias Tío Rico, fue trasladado a un centro asistencial por recomendación médica, debido a su estado de salud, que requiere atención sanitaria.
Insfrán, en delicado estado de salud, fue trasladado al Hospital Regional de Ciudad del Este, en la noche de este jueves, siendo inspeccionado primeramente por médicos del Ministerio de Justicia, quienes recomendaron su traslado a un centro asistencial, según el corresponsal Édgar Medina.
La verificación se realizó en el Centro de Reinserción Social de Minga Guazú, ubicado en el kilómetro 20 Acaray del mencionado distrito.
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Fuentes del Ministerio de Justicia, por su parte, indicaron que se tomaron todas las medidas de seguridad con apoyo de fuerzas tácticas de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas y que también se informó al Ministerio Público y al Poder Judicial.
El #MJ informa que la #PPL Miguel Ángel Insfrán, alias Tío Rico, ha sido trasladada a un centro asistencial, por recomendación médica debido a su estado de salud que requiere atención sanitaria. pic.twitter.com/sB89nbhNdG
— Ministerio de Justicia (@MJusticiaPy) October 17, 2024
Su abogado, Miguel Mendieta, había denunciado que su defendido se encontraba en grave estado de salud y que incluso no pasaría del lunes de esta semana si no era atendido con urgencia.
El presunto narcotraficante Miguel Ángel Insfrán debe enfrentar juicio oral y público en el marco de la investigación del operativo A Ultranza por el tráfico de drogas a Europa.
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Insfrán se encontraba anteriormente en la cárcel militar de Viñas Cué, pero fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad de la ciudad de Minga Guazú, junto a otros internos del Primer Comando Capital (PCC) y el Clan Rotela, donde cuenta con un régimen especial para evitar que los internos sigan delinquiendo desde su lugar de reclusión.
Régimen de los internos
Los internos asignados a este pabellón de máxima seguridad deben ceñirse a estrictas reglas, como el uso de uniformes y la permanencia por 22 horas en la celda. Se tratan de celdas individales que cuentan con una cama con colchón, sábanas y frazadas, además de baño con ducha.
El desayuno, el almuerzo, la merienda y la cena se realiza dentro de la celda y tienen permitido salir dos horas al sol en un cubículo de 8 metros cuadrados sin techo, donde, eventualmente, pueden interactuar con otros reclusos, pero son monitoreados por cámaras de seguridad.