Tras las declaraciones de Emanuele Ottolenghi, de la Fundación para la Defensa de las Democracias (EEUU), sobre la existencia de conflicto de intereses entre la política paraguaya y el mundo de los negocios, la ministra de la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad) se pronunció negando tales conflictos y asegurando que la coordinación entre instituciones en el país es satisfactoria.
“Aprecio muchísimo el trabajo de Ottolenghi, aprecio el trabajo de cualquier investigador, pero creo que no conoce muy bien nuestra legislación: la Seprelad no supervisa a los bancos, no puede haber ese conflicto de interés porque nosotros no entramos en los bancos, el que entra a los bancos es la Superintendencia de Bancos; nosotros emitimos la norma, pero el que toma la norma y va a todos los bancos, y revisa si están cumpliendo o no con la norma de reporte de operación sospechosa, (y) el que aplica la sanción es la Superintendencia de Bancos, no la Seprelad”, explicó.
Estas declaraciones coinciden con la relación matrimonial que mantiene González con Miguel Ángel Rodríguez, actual miembro del Directorio del Banco Itapúa.
“Que el Banco Itapúa no está cumpliendo con su función, no sé, puede que sea cierto o no sea cierto, pero eso solo lo puede decir la Superintendencia de Bancos y de aplicar la sanción que corresponda”, agregó.
Ottolenghi, quien investigó el movimiento en la zona de la Triple Frontera, sostuvo que no se puede lograr un fortalecimiento del sistema de investigación cuando los que tienen la responsabilidad de investigar todavía tienen intereses en el sector económico que se debe investigar.