En su artículo 7 de la ley de las tobilleras, se establece que será la máxima instancia judicial (Corte Suprema de Justicia) la que baje línea para saber cómo llevar adelante la implementación de esta herramienta.
Pese a eso, el Tribunal de Apelaciones de Feria de Central, integrado por los camaristas Juan Rodríguez Kennedy, Alicia Orrego y Joel Melgarejo, dispuso que Alberto Segovia Martínez, imputado por violencia familiar, sea el primero en utilizar la tobillera electrónica. El hombre tiene denuncias que involucran un presunto intento de matar a su ex pareja, en diciembre pasado. Esto habría ocurrido ya teniendo él la prohibición de acercarse a la víctima.
Por ese motivo, se le envió a prisión y estuvo recluido desde principios de enero en la cárcel de Emboscada. Sin embargo, el Tribunal le otorgó la posibilidad de ir a casa, pero usando el aparato, “lo cual permitirá mayor protección a la víctima”, dice la resolución.
Alberto Segovia debía salir ayer de prisión. Sin embargo, la dirección que otorgó en el barrio Trinidad de Asunción para cumplir su arresto estaba incorrecta, por lo que se proveerá otro domicilio, donde cumplirá el arresto. Se espera eso para que se le pueda colocar la tobillera.
SIN PLANIFICACIÓN. La ley del uso de tobilleras se sancionó el año pasado, y se anunció que se pondría en vigencia dos días antes de que terminara el año. Sin embargo, las instituciones involucradas estaban trabajando de manera coordinada para poner en marcha.
“No había apuro de las instituciones”, refirió Llanes. “Todavía no se cuentan con una cantidad suficiente para dar respuesta a todos los pedidos que pudieran presentarse”, expresó.
Detalló que tampoco se tuvo en cuenta la planificación que falta. Recordó que cuando se implementó el Código Procesal Penal, se había encomendado al Poder Judicial a trabajar en la implementación. “Eso es lo que no se hizo (ahora) y por eso consideramos que se tienen que ir cumpliendo las etapas”, dijo.
Por su parte, Silvana Luraghi, coordinadora de la Oficina Técnica Penal, explicó que por “cuestión reglamentaria” y “de prudencia”, lo conveniente es tener primero los puntos para que jueces implementen, principalmente en casos de violencia.
De manera interna se manejaba que primero se iba a elaborar un instructivo o la Corte iba a sacar una acordada, pero no se pudo socializar eso con todos los jueces.
El objetivo con la implementación de las tobilleras electrónicas, según el Ministerio del Interior, “es reducir el índice de violencia familiar, el feminicidio y la superpoblación de las penitenciarías”. ¿Quiénes lo podrán usar? Los procesados con arresto domiciliario o los condenados que deben cumplir prisión en casa.
Desde el 911 hablan que los aparatos son “invulnerables”
Alberto Segovia Martínez cumple hasta hoy prisión en la cárcel de Emboscada, ya que será beneficiado con el arresto en casa y será el primer hombre que recibirá la tobillera electrónica. Pese a las críticas y el disgusto, autoridades anuncian que la medida es invulnerable.
Según denuncias de su ex pareja, en diciembre pasado, Alberto habría intentado matarla en dos ocasiones, pero de igual manera será el primero en usar el dispositivo dentro de un plan piloto.
Hernán Escobar, director del Sistema 911 de la Policía Nacional, describió la tobillera como una medida no vulnerable, dando seguridad de que la herramienta no se acercará a la víctima.
¿CÓMO FUNCIONARÁ? Dicha herramienta tendrá una alarma que sonará en tres casos, ya sea si el hombre se acerca a la víctima, si hay batería baja, o si se apagó o dañó el aparato.
La alarma sonará en el centro de monitoreo, donde el control será de forma virtual, y también avisará a la víctima, que contará con una aplicación para vigilancia.
“Aparte, dentro de la casa, hay un aparato que no se puede mover, que determina la cercanía o la lejanía del dispositivo al disco”, sostuvo el director.
Según Escobar, incluso si hay corte de luz, se prevé supuestamente que efectivos policiales busquen al procesado y se hará la recarga de batería en la comisaría.
Segovia tuvo ayer una audiencia donde fue informado de cómo usar el aparato. Se le comunicó que puede mojar, jugar fútbol, todo dentro del perímetro establecido.
