El precio del tomate se mantiene a la baja. Ayer los mercados mayoristas vendieron en promedio a G. 85.000 la caja, 10% menos que los primeros días de enero, pero este comportamiento se observó antes de que ingresaran los tomates importados.
Es decir, como consecuencia de la inundación de tomates de contrabando, que a su vez perjudica a los horticultores paraguayos.
Aldo Villarreal, de la Asociación de Importadores y Comerciantes del Mercado (Asicoma), explicó que los primeros camiones con cargas procedentes de Misiones, Argentina, llegaron ayer por la tarde, un día después de lo previsto. Cada uno transportaba 30.000 kilos de tomate.
Las mercaderías están disponibles para el público desde esta madrugada en el Mercado de Abasto, de donde además se abastecen otros centros de distribución, incluso comercios del interior del país.
Como aún queda producción nacional, mencionó que por cada camión, el gremio retiene G. 500.000 para destinar a la compra de los remanentes de las fincas, especialmente del Departamento de Caaguazú.
El director de Comercialización del Ministerio de Agricultura y Ganadería, Aníbal Roa, explicó que se están otorgando diariamente tres permisos de importación y que en diez días se evaluarán nuevas medidas con respecto a estas autorizaciones.
Por su parte, los productores rechazan que el ingreso de estos productos se haya aprobado sin un acuerdo con el sector, ya que consideran que todavía hay mucho tomate nacional para colocar en los mercados. Los horticultores denuncian que ya estaban recibiendo precios irrisorios de G. 1.500 por kilo y que esta situación solo generará más pérdidas para los pequeños productores.
LA CIFRA
30.000
kilos de tomate transporta cada camión que trae los productos desde Argentina. Al día hay tres permisos de importación.