Por Susana Oviedo
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Lleva 15 años como párroco de la iglesia Virgen del Rosario, de San Roque González de Santa Cruz, Departamento de Paraguarí. Es el padre Antony Miró (apodado Toni), dominico español, que cobró popularidad desde que anunció que no dirá misa el próximo 7 de octubre, día de la santa patrona del pueblo, la Virgen del Rosario, si el intendente Sixto Baruja (cartista) y otros nuevos dirigentes políticos cumplen con la intención de llevar al presidente Federico Franco a la iglesia, en cumplimiento de una advertencia que le hicieron.
En el pequeño municipio del Departamento de Paraguari, donde la ? parte de la población de alrededor de 25 mil habitantes es rural y campea la pobreza, las obras más resaltantes se realizaron por iniciativa del padre Miró y los tupãogua (parroquianos), como asegura él, y que llaman con desdén ciertos políticos y algunos docentes a los laicos comprometidos.
Un centro cívico, la primera escuela de fútbol, el único centro cultural del pueblo, la Junta de Bomberos Voluntarios, la Junta de Saneamiento, el Consejo de Salud, el primer consejo de directores de colegio y escuelas, el ballet de la ciudad, aulas, dispensario sanitario y hasta un ropero comunitario, donde se distribuyen prendas de vestir a personas de escasos recursos, además de pequeñas becas de estudio para jóvenes universitarios y un centro de capacitación y catequesis, son algunas de las obras y emprendimientos del padre y los feligreses con conciencia y compromiso social. Sin embargo, este es uno de los puntos que el intendente no comparte.
“Cuando asumí me di cuenta que la ciudad estaba totalmente organizada por un grupo de gente de la iglesia. En total estaban en unas 15 comisiones de todo tipo”, cuestiona Baruja. En algunas de ellas también estaba el padre.
Por eso, el intendente dispuso que para que cualquier comisión o comité que se forme en el municipio, los cargos de la comisión directiva “deberán ser ocupados, en su totalidad, por personas de nacionalidad paraguaya natural”. Es más, según el cura, anuló todos los comités y asociaciones que había en el pueblo, para que volvieran a solicitar su reconocimiento ante la Municipalidad y él, como intendente, poder controlarlos”.
El intendente, dice Miró, no sabe nada del trabajo que hay en San Roque. “Nosotros llevamos 15 años trabajando; él acaba de llegar. Tampoco entiende lo que es la participación ciudadana. Él quiere intervenir toda la sociedad, y lo que no puede controlar, tiene que destruir”, explica.
POSICIÓN. El padre Toni es licenciado en Comunicación y licenciado en Teología. Tiene experiencia docente y dicta talleres en distintos foros de educadores. Integra el Consejo Presbiteral y preside el Consejo Pastoral de la Diócesis de Carapeguá. Es delegado de pastoral social diocesana y consejero vicarial de su congregación (Orden de Predicadores, dominicos).
El padre Miró dice que apoyó el proyecto político de Fernando Lugo, expresidente de la República que, a criterio suyo, fue destituido por un “golpe de Estado parlamentario”. Dice que apoyó a Lugo, porque está con el cambio social y político, “dirija quien lo dirija”, y porque fue la luz que se encendió para que Paraguay, por primera vez, “vea un poco de futuro”.
Sobre Federico Franco comenta que “durante toda su vida quiso ser presidente y que lo ha conseguido mediante un golpe”.
La confrontación instalada en la comunidad entre el intendente, respaldado por algunos políticos y docentes liberales y oviedistas, y la Iglesia Católica, es porque estos confunden “el Evangelio y la pastoral social con el comunismo”, afirma el religioso.
Por eso le cuestionan que predique que la tierra tiene una hipoteca social o que la propiedad privada no es un derecho absoluto. “El intendente no conoce la doctrina social de la Iglesia”, dispara.
Para él, hay una campaña de difamación en contra suya y los miembros del Consejo Parroquial, que proviene de gente que no admiten que la Iglesia trabaje por los pobres, por la concientización, por la cultura, por las luchas sociales y por los campesinos. “Todo esto es politiquería para ellos”, remata.
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