El alumbramiento se produjo el pasado viernes tras un fuerte temporal que dejó a varias familias sin energía eléctrica, incluyendo la USF de Capitán Miranda, Itapúa.
Ante esta situación, un equipo liderado por la obstetra Lilian Núñez procedió al acompañamiento del parto utilizando las linternas de sus celulares.
El bebé, un varón, nació con 3,010 kilos y fue llevado hasta el Hospital de Encamación para que lo inspeccione un pediatra.
Tanto la madre como el neonato fueron dados de alta el pasado domingo y ambos están en perfectas condiciones de salud.