Casi a las 11.00 de este jueves, Rubén Villalba, finalmente, salió de la Penitenciaría de Tacumbú y pasó, rápidamente, por el Departamento de Judiciales, para luego confirmar su libertad.
“Ya estamos todos, ya está Rubén”, “Marina Cué pueblo mba’e”, y “Libertad, libertad a los presos por luchar”, fueron los cánticos de las personas que lo esperaron en las afueras de la cárcel.
El campesino se convirtió así este jueves en el último preso condenado y posteriormente absuelto por la Masacre de Curuguaty en recuperar su libertad.
Villalba lamentó que en Paraguay no exista justicia y dijo que ahora irá a su casa, desde donde seguirá luchando. Aseguró que la condena que recibieron por el caso Curuguaty fue injusta.
Fueron condenados y posteriormente absueltos por el caso 11 campesinos. Cuatro de ellos, además de Villalba, seguían presos en Tacumbú hasta el mes de julio de este año.
Pese a la absolución, el labriego debió seguir en la penitenciaría por otra causa de invasión de inmueble que enfrentaba, conocido como el caso Pindó.
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El juez Claudio Martínez finalmente concedió la libertad condicional solicitada por la defensa por el caso Pindó y Villalba tenía que haber quedado en libertad ya el miércoles, pero los festejos por su liberación se opacaron cuando desde el Poder Judicial informaron que el hombre debía pasar nuevamente la noche en la cárcel.
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La abogada Sonia Von Lepel, representante Villalba, explicó que el error se dio cuando saltó un tercer caso de invasión de inmueble por el que fue procesado en el 2008.
Contó que la causa tenía sobreseimiento provisional, lo que implica el levantamiento de todas las medidas cautelares. La Fiscalía nunca solicitó ningún otro requerimiento conclusivo, por tanto el caso está extinguido como tal.
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Lo ocurrido el miércoles fue la segunda vez que la libertad del dirigente campesino se vio frustrada.
La primera vez fue en el 2014 cuando Villalba y otros cuatro campesinos condenados por la masacre realizaron una huelga de hambre de 58 días para que se revoque la prisión preventiva que enfrentaban hasta que inicie el juicio.
El Juzgado revocó la medida, los condenados fueron a sus casas, menos Villalba, porque en ese momento ya saltó el caso Pindó y tuvo que seguir preso. Sin embargo, después del juicio oral, los cuatro campesinos también volvieron a la cárcel, hasta julio de este año.
Antecedentes. Los condenados por la matanza de Curuguaty fueron Rubén Villalba, condenado a 30 años de cárcel más cinco de medida de seguridad; Luis Olmedo Paredes, con una pena de 20 años de prisión; Néstor Castro, con 18 años, al igual que Arnaldo Quintana.
Las otras personas acusadas y absueltas son Lucía Agüero, María Fani Olmedo, Dolores López, Juan Carlos Tillería, Alcides Ramón Ramírez, Adalberto Castro y Felipe Benítez Balmori, que recibieron sentencias menores de no más de seis años.