La Policía Nacional reportó sobre la intervención en un nuevo caso de presunta violencia familiar, ocurrido en la noche de este último lunes, en una vivienda ubicada sobre la calle Ingavi casi Río Confuso de Fernando de la Mora, en el Departamento Central.
El comisario Carlos Acosta, de la Comisaría 2ª Central, relató a través de NPY cómo se desencadenó todo y brindó los detalles del hecho.
Recibí las noticias en tu celular, unite al canal de ÚH en WhatsAppSegún señaló Acosta, los uniformados acudieron hasta el domicilio, tras haber recibido una alerta a través del Sistema 911 de la Policía Nacional.
Una vecina del sitio manifestó que se escuchaban pedidos de auxilio desde dentro de la casa, pero que nadie podía ingresar porque estaba completamente cerrada y las rejas son altas.
Una vez que los agentes llegaron al sitio, una de las hijas del sindicado salió hacia la zona de la entrada y con la ayuda de los intervinientes logró abandonar el lugar.
Esta les manifestó que el hombre estaba amenazando a su esposa con un arma de fuego y también advertía con autoeliminarse. Además, dijo que dentro estaban otras dos de sus hermanas, una de ellas menor de edad.
Los uniformados convocaron el apoyo de agentes especiales y, una que vez que estos llegaron, ingresaron hasta la planta baja de la vivienda, mientras que el sospechoso subió hasta el segundo piso y corrió hacia la parte posterior, intentando escapar.
Desde ese lugar, el hombre se lanzó hacia un patio baldío colindante con la casa, pero terminó herido, con fracturas en una pierna y lesiones en la otra extremidad, momento en el que se logró su detención.
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Tras esto, fue derivado hasta un centro asistencial, donde quedó bajo custodia policial y a disposición del Ministerio Público.
De acuerdo con lo que indicó el comisario Acosta, el hombre es agente de seguridad privada, por lo que se convocó a agentes especiales, ya que se presumía que tendría más de un arma en la vivienda.
El jefe policial manifestó que este hecho ocurrió solo alrededor de dos a tres horas después de lo sucedido en Villa Elisa. En este primer caso se denunció un intento de abuso sexual, tras lo cual acudieron los agentes policiales.
El sindicado comenzó a abrir fuego contra los intervinientes, lo que derivó en la muerte de un uniformado de 22 años. Además, el presunto agresor asesinó a su concuñada y finalmente fue encontrado calcinado y se presume que se autoeliminó.
