Un murmullo invade la saturada sala de espera del Servicio de Traumatología del Hospital Ingavi del Instituto de Previsión Social (IPS). Los rostros de las personas reflejan resignación y cansancio. Este servicio absorbe una alta demanda con 480 consultas diarias y 10.000 cirugías al año.
“¿Se espera mucho?”, preguntó con voz quejumbrosa una paciente a otra sentada a su lado. “No sé”, respondió. “Es la primera vez que vengo. Pero a las 10:00 recién empieza el turno”, añadió.
La fila no cesaba frente a la oficina de admisión. Un solo funcionario atendía al centenar de personas para responder preguntas, agendar las citas médicas, para recibir quejas por la extensa espera –que según denuncias era hasta de cuatro horas– o para confirmar las consultas. En la fila siempre había un promedio de 5 a 10 personas.
En silla de ruedas, con muletas o con yesos en manos o piernas, una gran cantidad de pacientes, adultos mayores y niños, aguardaban hasta cuatro horas para ingresar al consultorio de Traumatología.
Entre las charlas y consultas con los pacientes, las experiencias sobre los agendamientos eran diversos. Por ejemplo, Patricia Cabrera consiguió turno en 30 días por el call center, pero otro asegurado –que prefirió el anonimato– contó que llegó a las 9:20 y que tras preguntar en ventanilla, le dieron cita médica con un traumatólogo general en el día, en el turno que empezaba a las 10:00.
Otro caso similar fue la de un adulto mayor de casi 70 años que se acercó a la ventanilla de admisión para agendar la consulta para su esposa que sufrió un accidente, según contó al funcionario. Tras teclear y verificar la disponibilidad, el funcionario le dijo que había disponibilidad a partir de las 14:00. El hombre de 70 años le dijo que prefería el lunes de tarde. El agendamiento fue un éxito. El jubilado se retiró feliz.
En cambio, otros sufren con las llamadas al call center que agenda en un promedio de 30 días. O ir solo para agendar la cita médica es perder un día laboral, se quejaron otros.
ETERNA VIGILIA
Con las muletas colocadas a su lado, estaba sentada Patricia Cabrera, de 28 años, que llegó a las 06:10 de la mañana desde Luque hasta San Lorenzo para confirmar la cita médica con el traumatólogo especialista en mano y pie. Eran las 10:00 y Patricia seguía esperando que su nombre aparezca en la pantalla. La vigilia ya era tediosa. “A las 7:00 tenían que empezar a llamar”, dijo con voz resignada.
A Patricia le costó semanas conseguir una cita médica. Llamó al call center, un día de la semana que ya no recuerda, pero en el primer intento le informaron que debía intentar otra vez el siguiente viernes, día que habilitan los cupos para el traumatólogo de manos y pies. “Para entrar (al call center) es un calvario. A veces entrás y no conseguís porque ya se dio todo”, dijo.
Entonces, volvió a intentar un viernes, pero cuando el operador le atendió tuvo la mala noticia de que ya se llenaron las vacancias. Lo volvió a hacer al siguiente viernes. Esta vez, mejoró la inversión del tiempo: una cita, pero para dentro de un mes.
Tras la mudanza del Servicio de Traumatología del Hospital Central a Ingavi, era la primera vez que Patricia iba a esta nueva dependencia. Contó, que antes el médico le daba una orden con la cual agendada el siguiente turno directo en ventanilla, pero tras el traslado desconocía el nuevo mecanismo por lo que tuvo que recurrir al call center.
Resignada, el pasado viernes llevaba sentada ya cuatro horas. No dejaba de mirar la pantalla y su nombre no aparecía. Patricia contó que requería la opinión del especialista para confirmar o descartar otra cirugía más del pie izquierdo. “Lo más probable que me vuelva a operar para quitarme los tornillos”.
Ella sufrió un accidente en moto en febrero pasado, camino a su trabajo. Suma ya cinco meses de reposo, dos cirugías y 90 días de fisioterapia.
La asegurada contó que hasta hilos de sutura tuvo que comprar para la cirugía que le hicieron en el Hospital Central en febrero pasado, pero que el IPS le proveyó los tornillos y las prótesis, que tienen un alto costo. Patricia no se queja de la atención médica, pero sí del excesivo tiempo de espera.
En otra área, está el servicio de urgencias. Esta zona mostraba una aparente tranquilidad el viernes pasado a la mañana. Una mujer –que prefirió no dar su nombre– estaba sentada en el piso aguardando informes de un pariente que sufrió un accidente. El IPS “es una de cal y otra de arena”, dijo con relación a la atención.
- 10.000 cirugías al año se concretan en el Servicio de Traumatología del seguro social.
- 9.000 consultas se registran mensualmente en este servicio del IPS.
- 480 atenciones ambulatorias a pacientes adultos y pediátricos, es la cifra de atención diaria.
Con interpelación a cuestas, Bataglia se aferra al cargo
El doctor Vicente Bataglia, presidente del Consejo de Administración del Instituto de Previsión Social (IPS), sigue aferrado al cargo a siete días de la denuncia de supuesta negligencia médica con la amputación errónea de la pierna a Ramón Samudio (78). Y tiene a cuestas el pedido de interpelación en la Cámara de Diputados.
En el caso de Ramón Samudio incluso se denuncia que el procedimiento quirúrgico presuntamente solo estuvo a cargo de dos residentes médicos, sin la supervisión de un tutor médico.
La denuncia de mala praxis le costó el cargo tanto al doctor Aníbal de los Ríos, ex jefe de Traumatología, como al doctor Óscar Franco, ex director médico del Hospital Central, e incluso los médicos y residentes están bajo sumario administrativo, y fueron apartados del cargo, mientras avanza la investigación en el Ministerio Público.
En cambio, Bataglia que está al frente del principal seguro de los trabajadores del país desde el 11 de marzo de 2021 no solo acumula denuncias de mala praxis, sino de un desabastecimiento general de medicamentos e insumos, y de un servicio médico que no abastece a la demanda.
La Cámara de Diputados aprobó la semana pasada un proyecto de interpelación al titular del IPS. El pedido se derivó a comisiones y se espera recién su estudio en la sesión de esta semana. Si se tienen los votos necesarios, se estipulará la fecha de interpelación, en la que el doctor Vicente Bataglia debe ir a la Cámara Baja para rendir cuentas sobre la denuncia.
Tras este procedimiento, los legisladores pueden emitir un voto censura que implica retirar la confianza a su gestión y recomendar la moción de destitución.
La decisión de destitución está en manos del presidente Mario Abdo. El entorno político apunta a que el doctor Vicente Bataglia es protegido por la senadora del Partido Colorado Lilian Samaniego.
Incluso, la familia de Ramón Samudio y los asegurados protestaron la semana pasada para exigir la renuncia del titular del IPS. En conferencia de prensa, el doctor Bataglia dio a entender que no renunciará al cargo.
Asegurado ya tuvo la cuarta operación
Ramón Samudio ya fue sometido el fin de semana a la cuarta cirugía y se encuentra estable, informó la familia. Al asegurado solo le intervinieron para la extracción de los tejidos con necrosis de la pierna derecha. Según los médicos, incluso requerirá una quinta operación. Mientras sigue internado, la familia persiste con la denuncia de negligencia.
Servicio se agenda en ventanilla o solo por el call center
Ni por Mi IPS ni por la asistencia en línea de la web. Los agendamientos para traumatología general o con los especialistas de mano y pie, rodilla, columna y otros, solo se tramitan por el call center o en ventanilla del Servicio de Traumatología en el Hospital de Especialidades Quirúrgicas Ingavi del Instituto de Previsión Social (IPS), ubicado en San Lorenzo.
O en todo caso, los asegurados pueden optar por ir de manera presencial hasta Ingavi y pedir una cita médica con un traumatólogo en ventanilla, o caso contrario, optar por el otro mecanismo, que es el call center, desde la línea baja al (0800-11-5000) o desde el celular al 180.
En ventanilla, actualmente, se otorgan turnos para el día o para un plazo de 2 a 7 días, dependiendo del tipo de especialista. En cambio, en el call center el promedio de espera es de 30 días, comentaron los pacientes.
Tras el traslado de los consultorios desde el Hospital Central hasta el Hospital Ingavi, los asegurados quedaron desorientados con relación a los agendamientos. Muchos aún van hasta la ventanilla del Hospital Central.
Una funcionaria reitera a todos los que preguntan que los agendamientos se hacen solo por el call center y que el servicio ya se mudó al Hospital Ingavi.