Para conmemorar el tercer aniversario del fallecimiento de Báez Sosa, en Argentina se tiene previsto para esta tarde una ceremonia religiosa, con una colecta solidaria. En tanto, en nuestro país se preparan dos movilizaciones para exigir justicia por el joven.
Este miércoles 18 de enero se cumplen tres años de aquel cobarde ataque, donde ocho rugbistas desataron su ira y apagaron los sueños e ilusiones de un joven de 18 años de nombre Fernando Báez Sosa, en la vereda de un local bailable en Villa Gesell, en el vecino país.
La víctima, hijo de paraguayos oriundos de Carapeguá, fallecía a consecuencia de los terribles golpes que recibió de ocho cobardes jóvenes que, luego de cometer el hecho, se retiraron a festejar lo sucedido y hasta incluso fueron a cenar como si nada hubiera pasado.
Hoy, a tres años de aquel terrible hecho, los responsables son Máximo Thomsen, de 23 años; Luciano Pertossi, de 21 años; Ciro Pertossi, de 22; Lucas Pertossi, de 23; Ayrton Viollaz, de 23 años; Enzo Comelli, de 22; Matías Benicelli, de 23; y Blas Cinalli, de 21 años; quienes se enfrentan a un juicio oral y público que los podría condenar a cadena perpetua en el vecino país.
El juicio se inició el pasado 2 de enero y esta semana entró en su etapa final. Se espera que la lectura de la sentencia se realice el próximo 31 de enero.
En los días que lleva el proceso, ya se escucharon las declaraciones de testigos, guardias de seguridad, amigos de Fernando y en los últimos días, declararon dos de los autores, que rompieron el pacto de silencio que hicieron con sus amigos.
Graciela Sosa, la madre de Fernando Báez Sosa, mencionó a los medios de prensa que este proceso es muy difícil para ella y su esposo, por lo que esperan que se haga justicia en nombre de su único hijo.