Reformar el marco legal que regula el impuesto inmobiliario para establecer que todos los tributos se paguen sobre la base del valor real de la propiedad, propone Rafael Filizzola, precandidato presidencial del Partido Democrático Progresista (PDP), como solución a la injusticia actual en esta materia. De esta manera, propone desestimular la especulación e incentivar la producción en las tierras rurales.
En su opinión, también deben establecerse incentivos para propiedades que tengan un valor histórico o ambiental, de tal manera que sus propietarios tengan la posibilidad de recuperarlas y darles un uso útil.
Establecer la base para el cálculo del tributo sobre valores reales facilitará además el cálculo para eventuales indemnizaciones, en caso de expropiaciones. “Hoy, la distorsión entre el valor comercial y el fiscal, se presta a prácticas corruptas a la hora de establecer estas indemnizaciones. Finalmente, se deben contemplar incentivos para las zonas protegidas por razones ecológicas”, plantea.
Por otro lado, afirma que el valor fiscal genera una distorsión y una discriminación arbitraria, ya que lugares comercialmente más valiosos pagan menos impuestos que aquellos que tienen menos valor.

La zona céntrica de Asunción es un ejemplo de esto, aclara, y agrega que aquí además están los edificios de valor histórico o urbanístico, que tienen una serie de restricciones en cuanto a su uso, pero en contrapartida ningún aliciente.
“Las propiedades céntricas en general tributan en base a una escala que viene de décadas pasadas, hoy totalmente desactualizadas”. Lo que a criterio suyo constituye uno de los factores que impiden el desarrollo del centro histórico, a pesar de su valor cultural y el enorme potencial que tiene.
Una situación que se debe enmendar “con suma urgencia” para poder aprovechar todas las enormes oportunidades en cuanto a la recuperación de espacios para comercios, recreación y viviendas, señala.
El impuesto inmobiliario constituye un ingreso esencial para los gobiernos municipales para promover la descentralización en el país, pero debe calcularse sobre la base de valores comerciales y no fiscales, añade.