HOHENAU
Con el objetivo de concienciar a los jóvenes sobre la importancia de conocer, valorar, conservar y proteger las Misiones de Jesús y Trinidad, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, estudiantes de numerosos colegios de Asunción y varias ciudades del interior de la República participaron de un foro de tres días en las localidades de Jesús de Tavarangué y Trinidad del Paraná.
La actividad se inició el jueves y culminó ayer con una celebración religiosa desarrollada en la Misión de Trinidad, a cargo del obispo Claudio Silvero, de la diócesis de Encarnación, y acompañada por el coro Mbya Guaraní de la comunidad Guaraní, además de otras orquestas de la zona.
Asistió el gobernador de Itapúa, Luis Gneiting, la ministra de Turismo, Marcela Bacigalupo, intendentes de la zona, además de las autoridades locales. También estuvieron representantes del Ministerio de Educación y Cultura.
Durante el foro, los jóvenes participaron de charlas explicativas sobre las Reducciones Jesuíticas y la necesidad de cuidar y promocionar las bellezas y su importancia histórica.
La actividad se denominó Primer foro Patrimonio Joven, Patrimonio de la Humanidad, Encuentro de Generaciones y estuvo organizada por la Secretaría Nacional de Turismo, el Ministerio de Educación y Cultura y la Red de Escuelas Asociadas a la Unesco.
En la jornada final de ayer, el obispo Silvero recordó la restauración de la Compañía de Jesús en la región, hecho ocurrido en 1814, 46 años después de la expulsión de los jesuitas en 1768.
Silvero repasó la historia admirando y reconociendo la monumental obra de la congregación jesuítica que construyó 30 pueblos en la cuenca del Paraná, incluidas las Misiones de Trinidad y Jesús de Tavarangué.
El prelado recordó el papel desarrollado por el primer santo paraguayo, Roque González de Santa Cruz, y sus compañeros mártires, Juan del Castillo y Alonso Rodríguez.