El precio por una entrada general será de 5 euros, confirmó el alcalde veneciano, Luigi Brugnaro, tras anunciar el calendario con los días en los que la controvertida tasa estará vigente, coincidiendo con las épocas de mayor afluencia turística del año.
La medida estará en vigor todos los días desde el 25 de abril hasta el 5 de mayo, cuando comenzará a cobrarse los sucesivos fines de semana (sábados y domingos) hasta el 14 de julio, con excepción del que coincide con el Día de la República italiana (1 y 2 de junio).
“No es una revolución, sino el primer paso de un camino para regular el acceso de los visitantes diarios. Un experimento que tiene como objetivo mejorar la habitabilidad de la ciudad, de quienes viven en ella y de quienes trabajan en ella”, explicó Brugnaro en un comunicado.
La “contribución de acceso”, tal y como la denomina el Ayuntamiento de la ciudad, será obligatoria desde las 08:30 horas locales (07:30 GMT) hasta las 16:00 horas (15:00 GMT) para todos los visitantes mayores de 14 años, mientras que quedarán exentos los residentes, trabajadores y estudiantes de la ciudad, así como turistas con una reserva de alojamiento en Venecia.
Las sanciones para quienes no paguen irán desde los 50 a los 300 euros.
“Venecia es la primera ciudad del mundo en implementar este camino, que podría ser un ejemplo para otras ciudades frágiles y delicadas que necesitan ser protegidas”, añadió el alcalde. El Ayuntamiento también se apoyará en una sala de control en la que recibirán datos de los sensores encargados de contar personas, de la emisión de entradas en museos y del tráfico en muelles y embarcaderos.
La polémica medida fue aprobada en septiembre, durante un pleno municipal bronco en el que se llegó a aplazar el voto por las protestas de centenares de ciudadanos. EFE