Tras los pronunciamientos de los gremios productivos y la confusión que se generó en torno al Reglamento 1115, Matteo Sirtori, jefe de Cooperación de la Unión Europea (UE), señaló a UH que la reglamentación entrará en vigencia, pese a que no se llegue a firmar el acuerdo con el Mercosur.
“El Reglamento 1115 ya se aprobó en el 2023 y se aplicará en el 2025 con o sin acuerdo con el Mercosur. El reglamento se ha discutido durante muchos años, no es algo nuevo. La prueba es que muchos países, como Argentina y Brasil, se han estado preparando”, sostuvo, al tiempo de señalar que, antes que un retroceso para el desarrollo local, representa “una oportunidad”.
“El reglamento es una oportunidad para que países como Paraguay puedan trabajar en un proceso de adaptación para mercados exigentes, que pagan más y que piden más transparencia y sostenibilidad. No es la UE solamente, ir en contra de estas normas es ir contra los mercados”, afirmó.
Sirtori manifestó que la organización europea entiende que los gremios están preocupados por el poco tiempo que falta para la implementación, pero dijo que por ello están trabajando con el Gobierno paraguayo con el objetivo de lograr un sistema de trazabilidad.
Detalló que está previsto que el documento entre en vigencia el 1 de enero de 2025 para las grandes empresas y a mediados del año, para las medianas y pequeñas firmas.
“Nadie obligará nada a nadie. Se aplica solo a exportaciones a Europa, cada país es libre y el reglamento claro. Se está trabajando en las categorías, cada país va a estar en la categoría de riesgo que va a determinar el nivel”, acotó.
10 millones DE EUROS no reembolsables. Con respecto al proyecto de convenio de cooperación técnica, señaló que implica una financiación de 10 millones de euros no reembolsables a favor de Paraguay, como una propuesta de la UE para ayudar a cumplir con los requisitos ambientales del Reglamento 1115.
En tanto, aclaró que aún no se firmó y que no busca imponer ninguna legislación europea, “por lo que no atenta de ninguna manera contra la soberanía de Paraguay”.
Señaló que entienden y respetan las diferentes posiciones de los gremios, ya que consideran “legítimas”, pero que también exigen respeto.
“Muchos de los gremios (que se pronuncian en contra) son los mismos que se están beneficiando con nuestro apoyo financiero. Llevamos 30 años en Paraguay y queremos quedarnos muchos años más. Es una cuestión de buena voluntad y no ideologizar. Siempre tratamos de responder a las incertidumbres y pedimos el mismo respeto”, expresó.
Acuerdo Mercosur-UE. Con respecto al debate por el acuerdo de libre comercio entre el bloque regional y la Unión, aseveró que lo que se discute es una serie de cláusulas que se vinculan con mercados y no con cuestiones ideológicas.
“Son discusiones a nivel técnico, de mercados, no una cuestión ideológica. Los que quieren presentar así, están equivocados”, ratificó.
Si bien dijo que incluso países europeos que conforman la UE también tienen posturas dispares, señaló que las negociaciones en el marco de este acuerdo están en manos de la Comisión Europea.
“Hay un debate de posturas y se está tratando de llegar a un equilibrio. Con respecto a la posición de algún bloque o país sobre Paraguay, hay muchas cosas que no se conocen. Estamos haciendo un puente para que se conozcan las buenas prácticas de Paraguay. Estamos viendo para que colegas de Bruselas vengan a ver cómo se está trabajando”, añadió.
El representante europeo lamentó que se haya desatado un ambiente de confusión, aunque resaltó el buen entendimiento que tienen con Cancillería Nacional.
Francia se opone. Según señaló la agencia EFE, el acuerdo de libre comercio entre la UE y otras regiones del mundo están bajo el punto de mira de los agricultores y ganaderos galos, que sostienen que se trata de pactos “negativos para sus intereses”, ante el ingreso de productos a precio mucho más bajos. Para el ministro de Agricultura de Francia, Marc Fesneau, “es inaceptable” el acuerdo con Mercosur, por no cumplir con los estándares europeos de calidad.
El primer ministro francés, Gabriel Attal, reafirmó su oposición a la firma del acuerdo y, en medio de protestas de sectores productivos, anunció un mayor control de las negociaciones entre productores y distribuidores, ayudas a la agricultura orgánica y una disminución de trámites administrativos, según la AFP.
Principales puntos de preocupación de gremios
Progresivo. La Unión de Gremios de la Producción (UGP) sostiene que el Reglamento 1115 representa una “amenaza” progresiva y a largo plazo para el sector.
Imposición. Los gremios sostienen que se quieren imponer legislaciones europeas extraterritorialmente.
Otras limitaciones. Temen que incluso se quieran imponer límites al uso de fertilizantes, impuestos a los combustibles para el sector agropecuario, entre otros.
Burocracia. Les preocupa la lentitud en el sector público y no confían en que las instituciones tengan capacidad para emitir tantas certificaciones.