Los eurodiputados, apoyándose en un determinado número de estudios, estiman que el uso del maíz MZHG0JG y MON 89034 y la soja A2704-12, creados para ser más resistentes a herbicidas como el glifosato, conducirán a una mayor utilización de pesticidas.
Los parlamentarios estiman además que la importación de soja genéticamente modificada es un factor clave de la deforestación en América del Sur, explican en un comunicado. “Rechazamos crear una situación injusta para nuestros agricultores, a quienes pedimos esfuerzos sobre la calidad de su producción, aseguró el eurodiputado liberal Pascal Canfin, criticando la entrada en Europa de productos con estándares sanitarios más bajos.
Las críticas del diputado francés se inscriben en un contexto de oposición en Francia al acuerdo comercial cerrado entre la Unión Europea (UE) y los países del Mercosur, por su eventual impacto en el agro galo y por los temores sobre la política ambiental del Brasil de Jair Bolsonaro.
Por otro lado, el ministro de Economía alemán, Peter Altmaier, había destacado que el acuerdo del Mercosur, por ejemplo, representa para todas las partes una gran oportunidad y recordó que la UE es ya hoy su mayor socio comercial e inversionista. “Nuestras relaciones económicas con los cuatro estados miembros del Mercosur –Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay– pueden desarrollar de esta manera una nueva dinámica, lo que al mismo tiempo permite que en particular para pequeñas y medianas empresas resulte atractivo involucrarse con más fuerza en la región”, sostuvo hace días el ministro alemán. AFP-EFE