“La UE insta a ambas partes a aceptar y cumplir la propuesta de tres fases y está dispuesta a contribuir a reactivar un proceso político para una paz duradera y sostenible, basado en la solución de dos Estados, y a apoyar un esfuerzo internacional coordinado para reconstruir Gaza”, dijo el alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.
En una declaración en nombre de los Veintisiete, Borrell brindó el “pleno apoyo” de la UE a la hoja de ruta integral presentada por el presidente Biden, quien opinó en una entrevista publicada ayer por la revista Time que considera que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, está prolongando la guerra en Gaza por motivos políticos y para mantenerse en el poder al frente de una compleja coalición de Gobierno.
“La paz y la estabilidad en el Medio Oriente redundan en interés de ambos pueblos, de la región en su conjunto, así como a nivel mundial”, recalcó el alto representante.
Borrell afirmó que “se han perdido demasiadas vidas civiles” y “se necesita con urgencia un alto el fuego duradero para garantizar la protección de los civiles, la liberación incondicional e inmediata de todos los rehenes, cuya seguridad y bienestar son motivo de preocupación, y para aumentar el flujo de ayuda humanitaria muy necesaria a Gaza en vista de la crisis humanitaria cada vez más profunda”.
Con todo, “la UE aprecia los decididos esfuerzos de Estados Unidos, Egipto y Catar para facilitar las negociaciones destinadas a poner fin a la guerra entre Israel y Hamás, garantizando al mismo tiempo la seguridad de Israel, con la que la UE sigue plenamente comprometida”, concluyó.
El diálogo entre Israel y Hamás para una tregua en la Franja de Gaza sigue sin cosechar avances, cuatro días después de que el presidente de Estados Unidos anunciara una propuesta para liberar a rehenes y que detendría una guerra que ya suma más de 36.500 muertos gazatíes.
El principal escollo sigue siendo el alto el fuego definitivo, línea roja de ambos partidos, para Netanyahu, un imposible hasta destruir a Hamás, y para estos, una condición ‘sine qua non’ liberarán a los rehenes.
Netanyahu ha recibido presiones del ala ultraconservadora de la coalición de Gobierno israelí para que no acepte un alto el fuego diseñado con la ayuda de Estados Unidos.
La supervivencia política de Netanyahu depende de que la continuidad de una compleja coalición de siete partidos conservadores, que han mostrado sus diferencias sobre cómo abordar la respuesta a Hamás en la Franja de Gaza.
El pasado 20 de mayo la Fiscalía de la Corte Penal Internacional pidió órdenes de arresto contra Netanyahu, su ministro de Defensa, Yoav Gallant, y tres líderes de Hamás.
Pocos días después, la CPI pidió la suspensión inmediata de las operaciones militares en Rafah, al sur de Gaza.