De acuerdo con Cuevas, la UIP había presentado hace unas semanas, mediante acción de la Policía Nacional, un pedido de allanamiento, fruto de una investigación realizada para que dos tiendas de la capital del Alto Paraná que comercializan calzados fueran intervenidas por sospechas de comercializar productos ingresados de manera irregular.
“Penosamente no tenemos conocimiento de algún resultado en su gestión en ninguna de las áreas, porque tampoco permite que otros fiscales bajo su coordinación participen en los eventuales allanamientos”, sostuvo.
Autoridades responsables de investigar el ingreso irregular, es decir, la unidad de Rosetti, expone siempre la excusa de no haber tiempo para realizar las intervenciones en negocios sospechosos, pero Cuevas especificó que cuando el tema es eventual contrabando se debe pedir rápido allanamiento, porque hay mercaderías que pueden ser incautadas y que con el correr de los días ya quizá no estén más.
“La UIP ya denunció antes a tres fiscales por mal desempeño, ya que no respetaron el Código Aduanero. Este tipo de acciones se enmarcan dentro de esta reglamentación, no del Código Penal”, explicó.
Solo en torno al rubro de calzado, Cuevas manifestó que la estimación es que el modus operandi de la red que ingresa irregularmente y lo comercializa viene dejando ganancias por USD 5 millones desde julio pasado; tiempo en que se relajaron los controles en la frontera, según dijo.
“Hay una red conformada para delinquir. Grupos de gente compran directamente desde Brasil, acopiando en Ciudad del Este, y redistribuyen mediante las transportadoras los productos sin pagar impuestos; es decir, que no fueron importados legalmente”, agregó.
En el esquema hay personas que vía redes sociales (Facebook principalmente) compran entre 2 y 10 pares de calzados, y se constituye una red de personas que abarca a unas 200 en total, quienes llevan a un solo lugar a vender en cantidad. Fueron identificadas 10 redes desde la UIP, pero operan al amparo de funcionarios de Resguardo de la Aduana en el Este, la Policía, las empresas transportistas y la misma Fiscalía, según mencionó.
Los rubros de confecciones, azúcar, pollo y carne vacuna también forman parte de esquemas que ingresan vía contrabando, que tienen como respuesta solo la inacción de parte de las autoridades encargadas de erradicar la actividad ilícita, de acuerdo con el encargado de la Unidad Anticontrabando.
El responsable recordó varios procedimientos de incautación, pero que no tienen seguimiento, ya que el fiscal Rosetti no procede a continuar la investigación. Uno de ellos fue el mes pasado, cuando los agentes de Seguridad y Tránsito de la Policía Nacional detuvieron un sospechoso cargamento en el Este del país que tenía golosinas, jugos y cervezas.
Rosetti sigue siendo fiscal anticontrabando en CDE.
La cifra
5.000.000 de dólares sería la ganancia de una red que delinque en el Este con mercaderías ingresadas de contrabando.