Se trata de una propiedad de 4.499 hectáreas, ubicada en la colonia Naranjito, distrito de Ybyrarobana –a unos 60 km de Curuguaty– en el Departamento de Canindeyú.
La estancia Pindó SA, ubicada sobre la ruta 10, pertenece a la familia Bendlin.
Según investigaciones hechas por los propios campesinos, unas 2.000 hectáreas serían malhabidas, ya que en el año 1963 el dictador Alfredo Stroessner las había “regalado” a Enrique Bendlin.
Supuestamente, Stroessner había cedido las tierras a Bendlin a cambio de un avión en desuso.
Los campesinos manifiestan que la familia Bendlin nunca presentó título de propiedad alguno de las tierras.
Afirman que solo poseen un contrato privado que data del año 1965, siendo reconocido por Juan Manuel Frutos, quedando la posibilidad de inscribir desde el año 1973 como finca número 50; pero hasta el momento no figura dicha finca en el Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), ni en los Registro Públicos.
En el lugar se realizaron varios desalojos, pero los ocupantes volvieron a ingresar al inmueble, por lo que los enfrentamientos con los campesinos, quienes dicen ser propietarios, son constantes.
Ayer un importante número de campesinos irrumpieron en el casco principal de la estancia y quemó casas y otros bienes.