Por Antonio Pecci | apecci@uhora.com.py
Nos dirigimos a él por indicación del maestro José Asunción Flores, quien nos aconsejó: “Lara Bareiro es quien puede dirigir la grabación de esta partitura con una buena orquesta de músicos”. Así fue como nos dimos a la búsqueda de quien sabíamos que vivía en algún lugar de la ciudad o de la Provincia.
Efectivamente, vivía en Castelar y pudimos contactarlo telefónicamente gracias a un señor de apellido Achar, también paraguayo, con quien vino a la reunión que se concretó en un bar de la capital porteña. Lo vimos entrar, delgado, alto, de pelo canoso y modales muy educados; el maestro Lara Bareiro tomó asiento, le explicamos el argumento de la película, miró la partitura elaborada por el maestro Luís Cañete y nos dijo: “Esto es música programática”. Un concepto que nos llamó la atención por nuestro desconocimiento del lenguaje musical.
A continuación, nos dijo que podía grabarse y que él estaba a disposición para apoyar nuestro emprendimiento, a condición de que nosotros nos hiciéramos cargo de la contratación de una pequeña orquesta, de unos 10 o 12 músicos, y el estudio de grabación. Nos estrechamos las manos y nos despedimos cordialmente.
Algo en su porte hablaba de una gran dignidad, un notable sentido de amor a la música y una actitud estoica ante la vida que le había tocado vivir lejos de su patria, con momentos de penuria y sufrimiento quizá, como tantos otros que habían sido arrojados al extrañamiento forzoso. Pero él los había afrontado con gran sentido de entrega, haciendo música en el lugar donde le tocó vivir, desplegando un talento y una sabiduría de la cual se privó a nuestro pueblo por la arbitraria decisión de la dictadura stronista.
Dicha grabación no pudo concretarse, pues los presupuestos de los músicos sobrepasaban nuestros magros recursos. Pero la oportunidad de conocerlo al maestro Lara Bareiro y su actitud de cooperar con el equipo de jóvenes venido de Asunción, significó un momento muy especial en nuestras vidas.
Actos en homenaje a Lara Bareiro
El jueves se realizaron varios actos conmemorativos en El Cabildo, en homenaje a los 100 años del nacimiento del músico.
En la ocasión se lanzó un álbum biográfico, titulado “Carlos Lara Bareiro. Apóstol de la música y de la dignidad”, dedicado a este impulsor de la música sinfónica en nuestro país.
Se contó con varios números musicales, entre ellos la pieza de guitarra compuesta por Lara Bareiro e interpretada por José Carlos Cabrera, y la intervención de la Orquesta Sinfónica del Congreso, que ejecutó “Ñasaindy jave”, bajo la dirección de Diego Sánchez Haase.
El Congreso hizo entrega de la Medalla Cabildo a la Creatividad, Innovación e Investigación Científica a los hijos del homenajeado, Carlos Alberto y Alejandro Lara Segovia.
En el Teatro Municipal también se realizó un acto a cargo de la Orquesta Sinfónica de la Ciudad de Asunción (OSCA), en donde el titular, Luis Szarán, convocó a cuatro jóvenes directores para dirigir el concierto, entre ellos Javier Acosta, Ricardo Arriola, Yanina Daniluk y Sion Uliambre.
Como invitado especial de la noche estuvo el solista Gustavo Lara, sobrino nieto de Carlos Lara Bareiro, quien ejecuta el violín perteneciente a su ascendiente.