El jefe de Estado no pudo brindar detalles concretos sobre la fecha de llegada de vacunas contra el Covid-19 en cantidades considerables como para terminar de inmunizar a los médicos y trabajadores de salud, y para empezar a vacunar a otros sectores de la población, en la cantidad requerida para lograr controlar la expansión del contagio, superar la grave crisis sanitaria y permitir la reactivación de la economía y la vida laboral.
El presidente optó por una larga conferencia tipo exposición, en donde no permitió que se la formulen preguntas. Enumeró las obras viales, como la construcción de rutas y puentes, pero admitió que no podía ofrecer una fecha precisa sobre la llegada de una cantidad importante de vacunas.
Es destacable que haya admitido los fallos más cuestionados a su gobierno. “Hemos cometido muchos errores, seguro que sí. No estamos conformes con el proceso de vacunación, pedimos disculpas si tenemos que pedir disculpas a la ciudadanía, y lo hacemos con mucha humildad. Hubiéramos querido tener las vacunas, antes y con mayor volumen, y estamos haciendo el mayor esfuerzo para empezar el proceso de vacunación masiva lo antes posible”, indicó.
No reconoció directamente que el principal error fue confiar en demasía en que el acuerdo Covax, a través de la Organización Mundial de la Salud, proveería las vacunas, sin preocuparse de realizar gestiones más directas para obtenerlas por otras vías, como sí hicieron otros países. Admitió que se compraron 4.300.000 dosis a través del mecanismo, pero hasta ahora solo llegaron 36.000 dosis y no se sabe cuándo llegarán las demás.
Abdo explicó que, tras el fracaso de Covax, también se adquirieron un millón de dosis de la vacuna rusa Sputnik V, pero hasta ahora solo se recibieron 4.000 dosis. Es decir, de un total de 5.300.000 vacunas compradas por el país, hasta ahora solo 40.000 fueron recibidas a la fecha, y no existen datos precisos de cuándo llegarán las demás. A cuatro meses de que los países vecinos comenzaron a vacunar, en nuestro país ni siquiera se ha podido terminar de inmunizar a los médicos y trabajadores de la salud.
Debemos admitir que el jefe de Estado dio un paso importante al comunicarse con la ciudadanía, explicar algunos de los temas que se le cuestionaban y mostrarse abierto al diálogo con algunos sectores sociales, pero no es suficiente. El Paraguay necesita en forma urgente vacunas, y un informe sobre construcción de rutas o puentes no compensa la carencia de estas.
La ciudadanía necesita ver señales claras. El Ejecutivo debe realizar acciones más concretas que ayuden a superar la crisis política que mantiene paralizado al país.