A pesar de que el país es cada vez más seguro, la población tiene más miedo de la delincuencia. Esta es una de las conclusiones de una reciente investigación académica financiada por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), titulada Atlas de la violencia e inseguridad en Paraguay.
El documento advierte que la tasa de homicidios por cada cien mil habitantes –uno de los indicadores para medir la inseguridad de un país– viene reduciéndose desde hace varios años. Sin embargo, la sensación de inseguridad creció a nivel nacional.
El estudio, realizado por el Instituto de Ciencias Penales y Sociales (Inecip-Paraguay) y la Universidad Nacional de Pilar, incluyó una Encuesta Nacional de Victimización, que se realizó con la metodología propuesta por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Crimen. La última encuesta de este tipo se había realizado en el 2010 por el Ministerio del Interior.
El trabajo radiografía, a través de la encuesta realizada a 3.150 personas en todas las zonas del país, la sensación de inseguridad y sus efectos económicos y hasta los cambios de hábitos que genera.
MENOS VIOLENTO. “En los últimos 20 años la tasa de homicidios cada cien mil habitantes viene descendiendo de manera sostenida, salvo pocos picos de subida. Si bien algunos departamentos como Amambay tienen tasas muy altas que llegan a 85 asesinatos por cada cien mil habitantes, aun así la tendencia es decreciente. No somos un país cada vez más violento si usamos como indicador el homicidio, que es lo que se usa a nivel internacional”, comentó Juan Martens, doctor en criminología e investigador principal de este proyecto.
“La Organización Mundial de la Salud cifra en 10 la cantidad de homicidios cada 100 mil habitantes para decir que un país tiene índices epidémicos. Paraguay ahora tiene 8 a nivel nacional. Por lo tanto, esta tendencia rompe ese mito de que Paraguay es cada vez más violento. Comparado con los otros países, Paraguay tiene un índice de seguridad media, media baja”, añadió.
Sin embargo, 97,1% de los encuestados manifestaron creer que hubo un aumento de la delincuencia en los últimos años. Al respecto, Martens señaló que la anterior encuesta sobre la sensación de inseguridad fue realizada por el estudio de opinión pública internacional Latinobarómetro, en el 2012. “Si tomamos esos datos, el miedo aumentó en un 49 por ciento”, indicó.
“Los datos de este informe revelan un excesivo temor al delito y percepción del aumento de la delincuencia que afecta a más del 95% de la población paraguaya, absolutamente desproporcionales con los índices objetivos de delincuencia y tasas de victimización, que muestran un descenso del 31,34% de los homicidios dolosos y leve aumento de los delitos contra la propiedad entre 2010 y 2017”, concluye la investigación.
Con respecto a las causas del miedo “excesivo” al delito, la investigación apunta a una “creciente criminología mediática” y vincula el hecho de que 90% de los encuestados dijo informarse casi diariamente a través de la televisión.
Por otro lado, Martens mencionó que donde sí hubo un aumento importante de los delitos contra la propiedad fue en el Departamento Central, donde este tipo de delitos aumentó en un 16% entre 2010 y 2017.
Asimismo, aseguró que si bien entre 2010 y 2017 hay un leve aumento del 2% de los delitos contra la propiedad a nivel nacional, “los robos de objetos aumentaron, pero da la sensación de que es mucho más porque por lo general los informativos se nutren de los hechos que ocurren en Central y Asunción, donde hay la mayor concentración poblacional y, por lo tanto, en números brutos hay una mayor cantidad de delitos”.
