Por Elías Cabral | Curuguaty
A raíz de sus publicaciones, en las que sindicaba al entonces intendente de Ypejhú, Vilmar Neneco Acosta, el periodista era constantemente vigilado.
Además de las publicaciones sobre el hallazgo de restos óseos en un inmueble perteneciente al padre de Neneco, Medina publicó un artículo sobre el supuesto transporte de marihuana en un vehículo que pertenecería a la Municipalidad de Ypejhú; dicho rodado tumbó en el camino a Curuguaty y amaneció en un taller mecánico.
Por el caso, el jefe comunal presentó una querella por difamación y calumnia contra Pablo Medina ante el tribunal de Salto del Guairá. Igualmente, se lo relacionó con el asesinato del ex intendente, Julián Núñez, el 1 de agosto del 2014.
Estas y otras varias publicaciones fueron los detonantes para que el clan Acosta planificara el homicidio, según las investigaciones de la Fiscalía, aprovechando una cobertura que realizaba el comunicador en la zona de Ara Verá, distrito de Itanará.
Rápidamente, las pesquisas lograron concluir en la presunta responsabilidad de Acosta como autor moral del hecho, mientras que los supuestos autores materiales serían su hermano Wilson y su sobrino Fabio.
En el marco del proceso judicial, el único condenado hasta el momento es el chofer de Neneco, Arnaldo Cabrera, que debe cumplir 5 años de prisión por omisión de dar aviso de un hecho punible. El condenado es una pieza clave en la investigación, ya que reveló varios hechos que serán utilizados como pruebas en el juicio oral y público, que dará inicio el 23 de octubre próximo, al ex intendente de Ypejhú.
El Tribunal de Sentencia está integrado por los magistrados Ramón Trinidad Zelaya como presidente, y como miembros Benito Ramón González y Yanine Ríos.
Fabio Acosta está recluido en el Brasil en espera de la extradición, mientras que el otro sindicado como autor material, Wilson Acosta, está prófugo.