De hecho, el único oferente es el médico veterinario Raúl Palacios, quien ya habría prestado este servicio hasta el 2019, en el Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi.
Ciertamente, en el país no existen muchas personas o empresas que puedan brindar un servicio tan especializado como el de la cetrería, un arte milenario muy costoso y especializado, que con-lleva no solo muchos recursos, sino también mucho entrenamiento para dominar a las aves rapaces.
Palacios indicó que cuenta con alrededor de ocho aves rapaces, entre halcones peregrinos, águilas y gavilanes para prestar el servicio de control para que las aves que se mueven dentro del ecosistema que rodea al aeropuerto internacional no signifiquen un problema para la normal aeronavegación de las compañías de aviación comercial.
El arte de la cetrería volvió a la palestra tras dos percances sufridos por dos aerolíneas, Air Europa, primero; y Latam, después, con aves que se introdujeron en sus una de sus turbinas, lo que ocasionó que los aviones debieran volver a tierra, para evitar algún incidente mayor. La idea con la cetrería es disminuir riesgos para los aviones.