Ciudadanos que acudieron a una de las charlas en la que el disertante era un subcomisario procesado por un hecho en el que fallecieron dos personas, reclamaron que la justicia permita este tipo de situaciones.
Se trata del subcomisario Ramón Manuel Villalba Gómez, jefe de la Unidad de Operaciones Tácticas Motorizadas (UOTM LINCE) ubicada en Mariano Roque Alonso, quien se encuentra procesado por un presunto hecho de gatillo fácil ocurrido en Ciudad del Este.
El subcomisario imparte charlas a docentes, estudiantes y público en general en varias instituciones educativas, como la registrada el 26 de junio pasado en la Escuela Básica San José, de Roque Alonso.
El contenido de las charlas es sobre los peligros del abuso en el consumo de drogas, cybercrimen y violencia familiar. La charla es parte del Plan Sumar, (ex Chau Chespi), impulsado por el Gobierno nacional para combatir el problema del abuso de drogas en Paraguay.
Defensa. El subcomisario Manuel Villalba indicó para nuestro medio que el procedimiento donde se produjo la muerte de dos personas se había realizado conforme a derecho y es el juez quien puede determinar la culpabilidad o no de los involucrados en el hecho.
“Es más, por algo el juez consideró que esté con libertad ambulatoria; de ahí, es él quien debe determinar en algún momento del proceso si es negativo o positivo; por lo tanto, puedo ejercer mis labores, eso dice la ley,” argumentó el jefe policial.
En el mismo sentido, la fiscala Diana Gómez, indicó que, aunque los once agentes se encuentran procesados y la causa fue elevada a juicio oral y público, la mayoría cuenta con libertad ambulatoria, lo que significa que también tienen libertad para trabajar.
“Son inocentes hasta que la justicia indique lo contrario; por lo tanto, tienen el derecho de ejercer sus labores”, señaló.
OPINIÓN. Sin embargo, el criminólogo Juan Martens, no lo ve tan así; a las claras y desde mucho tiempo atrás, mencionó, la Policía Nacional maneja un discurso, mientras ejerce acciones distintas. En el caso del subcomisario Villalba Gómez, por principio de precaución, el agente tendría que estar apartado hasta que se resuelva su caso, apuntó.
“No está sospechado de cualquier cosa, sino de un hecho grave,” detalló Martens.
Además refirió que el hecho se vuelve más delicado, teniendo en cuenta que ahora se encuentra en una institución como lo es la de los Linces, “que ya tienen muchas denuncias de torturas e incluso ejecuciones,” apuntó.
OPERATIVO. Por su parte, Villalba recordó que durante el procedimiento estaban tras los pasos de Carlos Cabrera Carrera, a quien se consideraba un asaltante peligroso, que acabó muerto durante un enfrentamiento. Indicó que reaccionaron porque aguardaban un vehículo parecido al de las víctimas y porque estos atropellaron una patrullera y se dieron a la fuga.
“Nadie puede sacarle la vida a una persona, pero en un enfrentamiento se sabe bien que si hay evidencias es porque pasó algo. Lastimosamente, el hombre iba en un vehículo, propiedad del buscado, atropelló la barrera policial y se inició la persecución, todo el actuar policial se obró a derecho y está en el acta de procedimiento que se envió a la Fiscalía y al Juzgado,” refirió el subcomisario.
El caso. Eran las 21:40 del 19 de noviembre del 2022 cuando Alex Enrique Alejandro Ortiz Estigarribia y Gloria Yetsica Espínola Cáceres fueron baleados por uniformados en un procedimiento policial en el kilómetro 12 Acaray. La pareja circulaba en un automóvil Toyota Allion, de color azul.
En un momento dado, el personal observó el vehículo, cuyo conductor, al percatarse de la presencia policial, atropelló una patrullera y luego se inició una persecución y balacera contra el móvil.
Alex Enrique Ortiz falleció en el acto, mientras su pareja Gloria Espínola fue gravemente herida. Finalmente, falleció en febrero de 2023, tras permanecer internada 78 días en terapia intensiva.
Los agentes policiales involucrados
Por el trágico procedimiento policial fueron acusados por homicidio doloso, el comisario Hugo Regis Florentín (50), el subcomisario Manuel Ramón Villalba Gómez (41), y el suboficial principal Richard Antonio Sebriano Silvero (45), quienes integraban la División de Investigación de Delitos de Alto Paraná.
Además del oficial primero Roberto Samaniego Parquet (32) y los suboficiales César González Agüero (24), Javier Antonio Martínez Ocampos (29), Alfredo Villalba Agüero (26), Rubén Darío Giménez Maidana (41), Jaime Javier Ramírez Brítez (33), Alder Centurión Céspedes (35) y Pedro Osvaldo Brítez Achar (35), ex integrantes del Grupo Especial de Operaciones (GEO).
La Fiscalía presentó ante el Juzgado varias pruebas contra los acusados y procesados por homicidio doloso, como peritajes, testimonios y otros elementos.
Un joven civil también había sido detenido, supuestamente por mover el vehículo de las víctimas unos cuatro kilómetros de la zona del fatal desenlace, para que puedan ser auxiliados.
