La movilización empezará en el Congreso argentino y terminará en Plaza de Mayo, frente a Casa Rosada (sede del Ejecutivo) bajo la consigna: “en defensa de la universidad pública”.
El presidente ultraliberal Javier Milei no actualizó el presupuesto de la universidad, que funciona con los fondos de 2023 en momentos en que el país padece un 288% de inflación interanual.
“Si la situación no cambia, en dos o tres meses la UBA podría cerrar”, dijo la semana pasada en conferencia de prensa Ricardo Gelpi, rector de la universidad, que es la más importante del país con más de 300.000 alumnos.
“Esta situación no la vivimos nunca antes en los últimos 40 años de democracia”, señaló Gelpi. “Llegamos a un punto de extrema gravedad, en el que se ve comprometido el futuro de cientos de miles de argentinos y argentinas”, agregó.
No obstante, el Gobierno insistió este lunes que hubo un acuerdo con las universidades públicas con un aumento del 140% de las partidas presupuestarias, junto a más de 16 millones de dólares para los hospitales universitarios.
INCENTIVO POLÍTICO. “Consideramos que hubo acuerdo con las universidades. Nosotros siempre vamos a defender a los alumnos, en su derecho a educarse y que tengan un futuro. Lo cual transforma la marcha en algo incentivado por la política”, aseguró el portavoz presidencial, Manuel Adorni, durante su habitual rueda de prensa diaria en la sede del Ejecutivo.
Adorni hizo referencia al aumento del 70% de las partidas de gastos de funcionamiento en marzo y otro 70% que se brindará en mayo, así como una extraordinaria para los hospitales universitarios de 14.403 millones de pesos argentinos (unos 16,5 millones de dólares).
Pese a la postura del Ejecutivo, desde el jueves pasado el vicerrector de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Emiliano Yacobitti, desmintió el supuesto acuerdo y señala que los ajustes son “insuficientes”.
“No hubo un acuerdo, hubo una propuesta del Gobierno, de manera informal, donde se comprometen a subsanar el 25% del ajuste de los gastos de funcionamiento de las universidades”, había indicado el vicerrector de la casa de estudios
Adorni dijo este lunes que no realizarán una asignación arbitraria de recursos ni darán un presupuesto deficitario y que tampoco permitirán que las universidades sean usadas por “políticos de turno para beneficio propio”.
Milei denunció en su cuenta de X que existe “adoctrinamiento” en las universidades, y compartió una serie de pancartas pegadas por agrupaciones políticas en universidades con leyendas en su contra.