Un tema urticante que deben resolver ambos países es la deuda que Paraguay mantiene con la petrolera venezolana PDVSA, de USD 320 millones por compras de combustibles en el 2009. El caso se halla en el ámbito del Tribunal Arbitral de la Cámara de Comercio Internacional (CCI) de París.
Paraguay fue el único país de la región que rompió relaciones diplomáticas con el gobierno de Maduro, “como una señal de coherencia con la postura en favor de la democracia y el respeto a los derechos humanos”, según la Cancillería paraguaya, en el 2019.
El comunicado difundido a las 13:00 en Paraguay al mismo tiempo que en Venezuela, resalta que “la República del Paraguay y la República Bolivariana de Venezuela anuncian que, luego de conversaciones entre los presidentes Santiago Peña y Nicolás Maduro Moros, han decidido restablecer las relaciones diplomáticas y consulares entre ambas naciones, así como la acreditación de embajadores de manera recíproca en los próximas días”.
De este modo, el anuncio que había realizado Peña, la noche del 30 de abril en que celebraba su triunfo en las elecciones nacionales, se cumple antes de fin de año. Israel, Venezuela y Argentina son los tres destinos que el Ejecutivo tiene previsto priorizar en la designación de embajadores antes de que culmine el 2030. Los mandatarios de Paraguay y Venezuela, según el comunicado oficial, se comprometieron a reiniciar las relaciones bilaterales “con total respeto a los principios fundamentales de igualdad de derechos, la autodeterminación de los pueblos, la no injerencia en los asuntos internos de otros Estados y la solidaridad”.
Esto, considerando la sostenida posición que mantuvo el anterior gobierno colorado, con Abdo Benítez, de denuncias y cuestionamientos, en todos los foros internacionales contra la administración de Maduro por las violaciones a los derechos humanos en el país caribeño.
Con los presidentes Iván Duque (Colombia) y Sebastián Piñera (Chile), Abdo Benítez había compartido escenario en Cúcuta (frontera con la República Bolivariana), el concierto Venezuela Aid Live, que reunió a cientos de miles de personas para favorecer el ingreso de ayuda humanitaria a los venezolanos.
En cambio, Peña defiende su posición argumentando que el hecho de que Paraguay reconozca un gobierno “no implica que seamos una voz en principios y valores. Creemos que la democracia hay que enriquecer como los procesos electorales amplios y la defensa de los derechos humanos. Nuestra voz siempre va a ser una voz de apoyo al pueblo venezolano. Lo he dicho públicamente, mi intención es restablecer las relaciones con Venezuela”, había expresado Peña el domingo 30 de abril en el programa de Mina Feliciángeli, en LaTele.