Fotos: Javier Valdez
Niñas y preadolescentes gritando entusiasmadas por ver a sus ídolos de cerca, conseguir un autógrafo o sacarse alguna selfie con ellos. ¿Estrellas de rock, artistas de cine o futbolistas? Nada de eso. Los generadores de tanta algarabía son youtubers, los nuevos ídolos de chicas y chicos tan jóvenes como ellos. Un fenómeno que sorprende a quienes ya rondan las cuatro décadas y una muestra del arraigo alcanzado en la cultura popular por una nueva forma de expresión y comunicación, que en nuestro país también ya tiene sus propios referentes.
Las escenas descritas son recientes. Ocurrieron apenas la semana pasada, en ocasión del festival que reunió a algunos de los principales youtubers de Latinoamérica —entre ellos, algunos locales— y convocó a una multitud de púberes y adolescentes. Algunos de estos nuevos referentes juveniles no solo se han vuelto extremadamente populares, sino que también hallaron en esta actividad un filón que, bien explotado, puede llegar a generar ingresos inimaginables para el nivel de preparación académica de los youtubers.
Por caso, uno de los youtubers más famosos de México es Luis Torres, cuyo canal, Luisito Rey, tiene más de siete millones de suscriptores. Sus videos pueden alcanzar hasta un millón de visualizaciones en pocos días y se estima que sus ganancias ascienden a alrededor de 9.000 dólares mensuales. ¿Cuál es el contenido de sus tan exitosos videos? Torres hace comentarios sobre diferentes temas, agregándoles toques humorísticos, si bien calificar a sus producciones como de humor, a muchos nos puede parecer discutible.
Sin embargo, esta característica —la del humor— es la que prevalece en los videos más vistos (aunque los temas pueden ser variados) y los youtubers que los producen, gracias a la popularidad alcanzada, pueden llegar a ser contratados por empresas para que promocionen sus productos a cambio de una suma que es directamente proporcional a la fama y a la llegada del realizador.
Hablemos de plata
“De Paraguay hasta ahora no he recibido ni siquiera una propuesta de alguna empresa para promocionar sus productos, pero sí he hecho publicidad de aplicaciones móviles de una marca de Inglaterra. Las firmas internacionales suelen pagar por una publicidad de 15 a 20 segundos al comienzo del video”, explica Xavier Reyes, quien en su canal, Nix Matic, sube videos relacionados con temas de terror y fenómenos paranormales.
Nix Matic es uno de los canales paraguayos más vistos y es el segundo en el país en recibir de YouTube la placa de plata —o botón de plata—, un reconocimiento por haber llegado a los 100.000 suscriptores. “Espero llegar al millón para que me entreguen la placa de oro”, manifiesta Reyes.
Es que además del valor del reconocimiento, incrementar la cantidad de suscriptores también significará un mayor ingreso de dinero, porque “una cosa es lo que te pagan los auspiciantes y otra lo que te paga YouTube”, aclara Reyes.
Hay una escala (ver recuadro) que es la que el sitio web utiliza para premiar a los más exitosos. No obstante, Reyes aclara que esta tabla no debe considerarse como rígida. "¿Por qué a los youtubers les cuesta tanto decir cuánto les pagan? Porque varía mucho de acuerdo al público. Por poner un ejemplo, 100.000 visitas de México o de cualquier país de Latinoamérica paga lo mismo que 5.000 de Estados Unidos, porque el de Estados Unidos abre una página y le aparecen infinidad de auspiciantes. En Paraguay aparecen apenas uno o dos”, agrega.
YouTube está integrado al servicio de Google AdSense, una plataforma en la que los anunciantes le pagan a Google por publicar sus anuncios en diferentes medios, entre ellos YouTube. A su vez, AdSense abona a los dueños de esos canales, que permiten insertar la publicidad en sus videos, una comisión por los anuncios mostrados y clicados. Solo por mostrar un producto de una empresa en sus videos, y hablar de él a sus seguidores, estos youtubers pueden llegar a cobrar desde 2.000 hasta 6.000 dólares por cada artículo o servicio que muestren.
Pensar en la monetización es algo que va a llegar más temprano que tarde a la mente del youtuber, incluso a la de quien empezó su canal solo con el interés de compartir sus temas favoritos con sus amigos o con algún aficionado. Pero en Paraguay no es tan fácil cobrar, debido que Google y YouTube no tienen sede ni filial en nuestro país. “Hay una forma de configurar la cuenta para poder cobrar. El proceso te lleva cuatro meses aproximadamente y te pagan vía Western Union. Yo llegué a cobrar y lo sigo haciendo, no me puedo quejar”, añade Reyes.
Dificultades
Llegar a ser un youtuber exitoso y ganar dinero con ello constituye un imán para muchos jóvenes, y en Paraguay esa tendencia global no es distinta. Solo que nada es tan fácil como parece. “Si uno abre un canal pensando que va a ser Germán Garmendia (youtuber chileno con seguidores en toda Latinoamérica) en tres semanas, que se lo replantee, porque tiene que ver con la construcción a mediano y largo plazo, y con la capacidad de viralización de Google. Hay que planteárselo como una empresa, que es la que genera ingresos”, asegura el profesor de guitarra Gabriel Lema.
El músico y docente es uno de los dueños del canal Gurú de la Guitarra, donde brinda lecciones para aprender a ejecutar este instrumento, desde el nivel más básico hasta el más avanzado. “No me considero un youtuber. Llegué a la plataforma como una manera de alojar los videos de mi página. Y después el canal funcionó mucho más rápido y de manera mucho más constante que en los estadios iniciales de mi proyecto Gurú de la Guitarra. La idea era brindar soporte digital a los alumnos de mi escuela, pero me convertí en youtuber de manera casi involuntaria”, explica el músico.
Para ser youtuber, Lema dice que hay que tener mucho tiempo disponible, además de “algo interesantísimo que decir y un capital para invertir en la promoción y aguantar el tiempo de crecimiento, que en este momento es lento. No es un lecho de rosas. Sugiero a un adolescente que lo haga mientras viva con sus padres, no tenga cuentas que pagar y le sobre el tiempo”.
Empezar a producir videos no requiere un equipo de filmación profesional, pues con un celular ya se puede grabar. “Pero si querés llegar lejos, que alguna marca te mire, ganarte a tu público, tenés que presentar lo mejor que puedas y eso implica trabajo e inversión de dinero. Hay que invertir en equipo, en luces, en tener un fondo apropiado, invertir en los productos”, afirma Ale Sciacca, maquilladora social recién graduada y propietaria del canal Wi Wi Make up.
Por su parte, Reyes dice que se precisa de una cámara o un celular con aplicaciones para grabar, y que tenga, además, la opción de editar. “La cámara no tiene que ser de primera calidad. Al principio, yo grababa con mi smartphone el audio. Tuvo muy buena aceptación, tenía 50, 60 suscriptores, 100 a 120 visitas en los primeros videos”, relata.
A la inversión inicial en equipos hay que sumarle la edición, tarea de la que se suelen encargar los propios youtubers, pero si se va a contratar a un editor profesional, el costo será mucho más elevado. La actividad involucra también la lectura de métricas —la respuesta de los usuarios— para ir modificando el contenido de acuerdo a los parámetros, lo que implica contar con un experto en marketing digital.
Producción
Para realizar un video, además de mucho tiempo “porque la edición te absorbe mucho”, hay que crear las ideas y guionar. “Es muy importante tener guión. Mucha gente cree que puede hacerlo de manera improvisada, y eso no funciona, a no ser que tengas demasiada experiencia y un público muy fiel. Normalmente guionamos todo, especialmente las páginas que hacen humor o misterio, como yo. Después es grabar, editar y subir a YouTube”, detalla el creador de Nix Matic.
Pero ahí comienza otro trabajo, que es compartir con la gente, con amigos, advierte el youtuber. “Nadie va a conocer tu contenido por subirlo a YouTube. Necesitás utilizar redes sociales, amigos que compartan con otros, y así. En algún momento, el algoritmo de YouTube va a asumir que tu contenido es bueno por la cantidad de likes, de buenos comentarios que tenés, y ellos mismos se encargarán de viralizar tu contenido, de compartir más”, señala.
Así se empieza y después ya hay que pensar en la monetización. “Yo conseguí una alianza con una marca americana de guitarras, que no pone dinero pero me entrega instrumentos. Ese tipo de alianzas es mucho más rentable a corto plazo y uno tiene que tener una base de fans importante. También tiene que tener una gran capacidad de negociación”, recomienda Gabriel.
¿Y a futuro? En opinión de Ale, hacerse grande en YouTube lleva años y depende de la estrategia, de ponerle onda a los videos y a las redes sociales. “Por el momento, lo mío es pura inversión, recién estoy empezando. Estoy en el proceso de armar mi identidad, viendo qué puedo hacer hoy para mejorar la calidad de mis videos y qué estrategias utilizar para ganar público. Es un trabajo de tiempo completo”, comenta.
Xavier sigue manteniendo su canal, Nix Matic, y aunque hace seis meses que no sube ningún video, tiene previsto retomar la actividad la próxima semana, y esta vez ya va a aparecer ante las cámaras. El youtuber cuenta que está recibiendo el apoyo del político Raúl Latorre para volver a sus videos.
Pero esta nueva forma de trabajar no se desliza como por un tubo. “Es mucho más trabado de lo que parece”, resalta Lema. “Es más fácil ser presidente de la República que tener un canal exitoso. Por eso es más seguro estudiar una carrera y ser bueno en algo, antes que convertirse en un youtuber exitoso, porque si no, estás perdiendo años formativos importantes. Pero si no te insume demasiada vida, si no estás distrayéndote de la vida real, es una experiencia muy interesante”, destaca.
Recomendable para quienes sienten la necesidad de compartir sus aficiones con sus amigos y con desconocidos que tienen los mismos gustos, ser youtuber no tiene que convertirse necesariamente en una actividad en la que ganar dinero sea lo más importante. Si viene, bien, y si es en grandes cantidades, mejor. Pero si no, la diversión vale la pena.
Si bien no existe una tabla de referencia, el promedio es de US$ 1,18 por cada mil vistas.
25.000 visitas = USD 29,5
50.000 visitas = USD 59
100.000 visitas = USD 118
500.000 visitas = USD 590
1.000.000 visitas = USD 1.180
GiannyL. Gracias a sus casi 300 mil seguidores, es la segunda youtuber más popular del Paraguay. Sus 232 videos han logrado más de 82 millones de visualizaciones.
Nix Matic. Todo sobre el mundo paranormal. Cuenta con más de 249 mil suscriptores. El canal fue creado en 2015 y logró que sus 47 videos sean vistos más de 47 millones de veces.
Fuente: Latamclick.