Con el lema La Eucaristía nos impulsa a anunciar la buena noticia se desarrolló este lunes la misa de la víspera de Caacupé.
La celebración estuvo presidida por Ricardo Valenzuela, obispo de la Diócesis de Caacupé, pero la homilía fue ofrecida por el sacerdote Osvaldo Duarte.
En su reflexión, el religioso pidió a todas las personas a ser misioneros y proclamadores de la palabra de Dios, igualmente a ser “sal y luz en el mundo”.
Además, mencionó que el desafío es la llamada a la vocación y misión de todos los bautizados.
“Debemos ser sal y luz para preservar el ambiente de la corrupción y descomposición. Debemos ser luz para iluminar el ambiente y disipar la sombra del mal y de las mentiras del fraude”, expresó.
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El religioso hizo hincapié en “nunca ser cómplice de lo oscuro, de las manipulaciones”, pero sí ser luz en el lugar donde nos toque estar.
“Hay muchos misioneros proclamadores de la palabra que se han consagrado al Señor, pero hoy el desafío es la llamada a la vocación y misión para todos los bautizados, ya que por el bautismo estamos consagrados como discípulos y misioneros”, aseveró.
En otro momento, explicó que como bautizados la misión es llegar a aquellos que están cansados, heridos o han perdido la esperanza. Igualmente, pidió que la Virgen de Caacupé “nos anime a ser auténticos discípulos y misioneros”.
“En este tiempo de pandemia, la ansiedad, el dolor, el miedo o la muerte de nuestros seres queridos nos hacen experimentar nuestra debilidad humana y nos hacen descubrir que necesitamos de Dios”, remarcó el padre.
Antes de su homilía, el religioso compartió la noticia del fallecimiento del padre Eder Rojas y lo recordó como un sacerdote dinámico que se encontraba trabajando en la capacitación de seminaristas.
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El Novenario culminó este domingo y el tema central fue denominado La eucaristía nos compromete a la solidaridad y al servicio del prójimo.
Caacupé vive una festividad de la Virgen distinta a otros años debido al Covid-19. Entre las medidas de contención para evitar la expansión del virus en la capital de Cordillera el acceso a la Basílica está restringido.
Los cambios también afectan al horario de la misa central por la Solemnidad, que este año será a las 7.00. La festividad mariana llegará a los fieles a través de los medios de comunicación y tanto Telefuturo, NPY como Última Hora preparan una cobertura especial.