“La desaparición de los orangutanes se ha convertido en un símbolo de la destrucción de las selvas de Borneo y Sumatra. Gente de todo el mundo la compara ya con el koala, que también se ve abocado a la extinción debido a la deforestación desenfrenada”, afirmó el presidente de la oenegé ecologista en una carta abierta dirigida al primer ministro australiano, Scott Morrison.
Sukhdev mostró su preocupación ante el hecho de que Australia tenga “las tasas más elevadas de extinción de mamíferos del mundo”.
La población de koalas en Australia oriental, ocupado en gran parte por el estado de Nueva Gales del Sur y la más densamente poblada del país, ha mermado un 33 por ciento en los últimos veinte años debido a la tala de árboles y ya solo quedan unos 20.000 ejemplares de la especie, apunta WWF en su misiva, también dirigida a Gladys Berejiklian, jefa de gobierno del estado.
Sukhev también mostró por su preocupación por la muerte masiva este año de peces en la cuenca de los ríos Murray y Darling, en Australia oriental, como consecuencia de una extracción hídrica excesiva.
Además, el presidente de WWF recordó el fenómeno de la decoloración de la Gran Barrera de Coral, situado en el noreste de Australia y el mayor sistema coralino del mundo, que podría desaparecer debido a la actividad agrícola.
“Los koalas necesitan los bosques, que además producen lluvia y almacenan carbono. El bacalao del río Murray y las comunidades aledañas necesitan agua. Debemos transformar los sistemas energéticos, del carbón a las energías renovables, para enfriar a la Gran Barrera y reducir los fenómenos meteorológicos extremos”, sentenció Sukhdev.