El partido se definió por centímetros. El poste le negó a uno de los mejores del torneo, el pateador argentino Ignacio Inchauspe, de los Yacaré, la conversión que le hubiera dado el merecido triunfo a la franquicia paraguaya.
El triunfo quedó para Pampas que nunca se entregó y con el tiempo cumplido siguió atacando y buscando.
La copiosa lluvia caída en los dos días previos y sobre todo en la madrugada sanisidrense hizo que el campo de juego estuviera pesado y el balón constantemente mojado, reflejado en la cantidad de errores forzados y no forzados de cada uno de los equipos.
La caída paraguaya se produjo por el try de Rodrigo Fernández en tiempo adicionado, que sentenció el destino paraguayo a jugar la próxima semana ante Peñarol.