La yerba mate orgánica es una opción natural, saludable y amigable con el medioambiente, ya que en el procesamiento de la planta no se utilizan productos químicos. Desde la cosecha de hoja verde hasta el procesamiento, se utilizan métodos naturales. Yerba Mate FD es la marca paraguaya que opta por esta técnica y brinda un producto de calidad con el mejor sabor para disfrutar de cada mate.
En este proceso, el estacionamiento de la canchada es 100% natural sin la utilización de cámaras de maduración acelerada. “La Yerba Mate orgánica de FD está respaldada por certificaciones internacionales y control de calidad que comienzan en el cultivo y culmina en el envasado y la distribución del producto”, expresó Cristóbal Giménez, director del Grupo FD.
El principal diferencial de esta marca es que en todo el proceso, desde las parcelas de yerba mate hasta el consumidor final, lo principal es el cuidado y la conservación de los recursos naturales y el ambiente, según explicó Giménez. “De esta forma, obtenemos un producto de alta calidad y los consumidores pueden estar seguro de que al consumir la yerba mate orgánica están también cuidando de la fauna y flora”, remarcó.
Anualmente, FD produce 700 toneladas de hoja verde, lo que representa cerca de 200 toneladas de yerba mate orgánica canchada.
Beneficios de la yerba orgánica
Desde el Grupo FD señalaron que las personas con problemas gástricos, o los que simplemente sienten que el mate les causa acidez, encuentran en la yerba orgánica un producto que no les genera ningún malestar físico. “Otro dato es que, quiérase o no, terminamos ingiriendo de forma indirecta las trazas de químicos que quedan en el producto final, más allá de que nos digan que no causan daño a la salud”, expresó el director.
En cuanto a los beneficios para el mediombiente, al tratarse de una producción más sostenible, favorece la biodiversidad y principalmente la actividad biológica del suelo, considerando el uso mínimo de insumos externos, la no utilización de fertilizantes y plaguicidas sintéticos ni manipulación genética. Todo esto minimiza la contaminación del aire, suelo y agua.
Proceso de producción
Detrás de cada sorbo de mate o tereré hay todo un proceso de producción. La yerba mate pasa por una larga cadena de producción.
“Desde la plantación hasta el primer corte de cosecha, pasa aproximadamente entre 4 a 6 años. Luego, la planta tiene una vida útil bastante larga, nuestras parcelas más antiguas tienen ya más de 25 años. A partir de la cosecha, las hojas verdes se someten unos segundos a fuego directo y al calor para reducir al mínimo el porcentaje de humedad y lograr hojas crujientes. Las hojas, posteriormente, son transportadas en cintas para continuar secándose. Posteriormente, se realiza una primera molienda gruesa o ‘canchado’ de la hoja ya seca. Luego se coloca la yerba canchada en depósitos y se la estaciona durante 12 meses o más, en depósitos donde se controla la temperatura y humedad”, explicaron desde la empresa.
“Por último, viene la molienda y envasado, donde para cada tipo de producto determina su blend: la proporción de palo, polvo y hojas que van a definir el sabor y aroma de cada producto”, agregaron.
Mercado internacional
El segmento orgánico es muy valorado en países europeos, así como también en Estados Unidos y Japón, lo que permitió que la yerba FD se posicione en estos mercados y gane cada día más adeptos.
A nivel local, la preferencia por los productos orgánicos también ha crecido bastante en los últimos años. Hoy, los consumidores se enfocan más en la calidad del producto y no tanto en la marca.
La yerba mate FD ofrece a los amantes del tereré y el mate seis tipos de sabores diferentes, cuatro compuestas que son: La Potente, una mezcla de yerba mate orgánica y catuaba; FD Anís; FD Menta y Limón; y La Especial, con menta y pata de buey. Además, hay dos líneas tradicionales: Fede Rico, con alto contenido de vitaminas y antioxidantes; y La Mejor, que se caracteriza por su corte rioplatense.
Con el afán de seguir creciendo, los encargados de la empresa siguen trabajando en el desarrollo de nuevas yerbas compuestas, nuevos cortes y formas de consumo, tanto para el mercado nacional como para mercado internacional, especialmente el asiático.