Cientos de familias de la zona de Caazapá y Canindeyú son las afectadas por la falta de cumplimiento de la resolución 100/2015, que prometía entregarles 700 hectáreas, pero de estas solo recibieron 140, que fueron destinadas a la construcción de viviendas, colegios y el resto fueron alquiladas a la cooperativa Pindó.
Los campesinos señalan que el reclamo tiene unos nueve años y que algunos iniciaron una huelga de hambre.
Las familias se encuentran frente a la oficina central del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), pero no reciben respuestas. La calle está bloqueada por la presencia de las familias del movimiento Campesino Paraguayo, fundado en 1980.
Nota relacionada: Hijos de campesinos en protesta dan clases frente al Indert
📌 Hijos de campesinos vuelven a dar clases en la calle frente a la sede del INDERT
— NPY Oficial (@npyoficial) October 3, 2024
♦️ Sus padres protestan en reclamo de una serie de reinvidicaciones, entre ellas el acceso a la tierra.
♦️ Algunos incluso toman la medida extrema de realizar una huelga de hambre.
📱 Seguinos… pic.twitter.com/0w3TZA1BOV
Uno de los afectados indicó que la resolución 100/2015 prometía entregarles 700 hectáreas, pero se les entregaron solamente 140 y construyeron viviendas en ellas, así como colegios. El resto se alquiló a la cooperativa Pindó.
Los campesinos denuncian que si bien el alquiler fue a la cooperativa, los verdaderos beneficiarios son políticos locales. El presidente de Indert se comprometió a entregarles los lotes, pero ya pasaron 48 días sin tener respuestas, revelaron.
Entre tanto, anunciaron que la medida va a seguir y que están recibiendo amenazas de imputaciones. “Nos toman de bobos”, lamentó uno de los afectados.
Sobre la situación de los niños, dijo que no hay para la alimentación de los niños, tampoco agua e incluso baño, ya que la institución cierra a las 15:00 y tienen que rebuscarse.
“Si me imputan voy a recibir con orgullo, porque no es que yo haya robado, que haya ingresado o hecho algún golpe con mis compañeros”, expresó Don Ángel, uno de los afectados.