Para las llamadas generaciones digitales, “las del botón, el click, lo inmediato, lo entretenido”, la vida se ha convertido “en un continuo parque temático: Todo es distracción y felicidad al instante”, lamenta la catedrática española María Lourdes González.
González preside el comité organizador del XIX Congreso anual de la Red Europea de Investigación Internacional y Multidisciplinar sobre los retos y usos de las tecnologías de la comunicación y la información (Eutic), que se ha reunido en Tenerife (Canarias) durante tres días.
Se trata de un foro que ha reflexionado sobre el impacto de las nuevas tecnologías en la sociedad, con la participación de expertos de diez instituciones académicas de Francia, Grecia, Portugal, Bélgica, Senegal, Brasil, Túnez y España.
“Me preocupan esas generaciones digitales tan poco nutridas y preparadas para resistir los embates del mundo. Estamos creando generaciones estúpidas y potencialmente frustradas”, asegura la catedrática de Historia del Pensamiento Pedagógico de la universidad de La Laguna (Tenerife, Canarias), en una entrevista con Efe.
Y todo eso, profundiza, provoca “una fragmentación de mentes y de espíritu” que hace que “luego no seas capaz de conectar con el de al lado, con las personas de carne y hueso. No es solo el ciberacoso, el bullying... es la incapacidad que se va generando en mentes en formación de crecer sanamente y relacionase con el entorno que les rodea”.
Fragilidad democrática
La preocupación de la Eutic se extiende a “la pérdida del sentido de comunidad, de lo público, de la cohesión social, lo que fragiliza los sistemas democráticos” y alimenta “la deshumanización”, apunta.
González alerta sobre el avance de una “era tecnocientífica” en la que los individuos son cada vez más “seres pantállicos”, “gente sin consciencia” que es, a la vez, “consumidora y productora de contenidos” en un ecosistema en el que “todo es efímero, instantáneo”.
La experta advierte además de los peligros de delegar decisiones en los algoritmos, que “no tienen ética”, y asume que en el ámbito educativo, herramientas como Chat GPT obligan a cuestionarse “profundamente” el modelo de enseñanza.
Fuente: EFE